Desde la COR nos solidarizamos con la dirigente del Partido Obrero, Vanina Biasi, procesada por denunciar en redes sociales el genocidio contra el pueblo palestino. La causa fue iniciada por el fiscal Stonelli junto a la DAIA y la periodista Romina Mangel en 2023, el proceso confirmado por el juez Rafecas y recientemente se confirmó el procesamiento en la sala 1 de la Cámara Criminal y Correccional Federal. El pretexto con el cual se persigue a Biasi es “violar la ley antidiscriminatoria 23.592” que persigue a quienes aliente “persecución u odio contra una persona o grupos de personas a causa de su raza, religión, nacionalidad o ideas políticas”. Increíble contrasentido al que llegan los mecanismos de represión del Estado para defender un genocidio basado en los intereses del imperialismo yanki y sus aliados sionistas en Medio Oriente. Una vez más, la burguesía empuña a las instituciones que supuestamente igualan a todos ante la ley para perseguir a luchadores, demostrando que la justicia abstracta que pregonan es la injusticia del orden social de la clase dominante.
Además, resulta de gran importancia para el imperialismo y el sionismo reprimir toda expresión de solidaridad con el pueblo Palestino ya que está atravesando un momento de enorme debilidad y el cuestionamiento a su política se extiende a todo el mundo, con importantes expresiones de solidaridad obrera mediante bloqueos de buques enviados al enclave.
A pesar de la represión, en Argentina, en conjunto con el proletariado mundial, hemos tomado la causa palestina como una instancia de lucha contra el imperialismo en todo el mundo. El proletariado de Medio Oriente y del Magreb debe enfrentar a sus gobiernos y expulsar al imperialismo de la región y destruir el enclave de Israel y así frenar el genocidio en Gaza, formando una Federación de Repúblicas Socialistas de Medio Oriente y el Magreb como forma estatal de la dictadura del proletariado internacional. El proletariado de los países imperialistas debe derrotar a sus gobiernos y frenar la guerra. El proletariado ruso y ucraniano debe luchar en conjunto para derrotar el proceso de asimilación de los ex Estados obreros y transformar esa guerra en una guerra de autodefensa revolucionaria. El proletariado chino debe entrar en escena contra el proceso de asimilación y unirse a las luchas obreras de todo el mundo. En definitiva, debemos buscar la intervención de los batallones obreros en todos los países, de forma independiente, para que, con los métodos y la organización de la clase, logremos parar la masacre de una nueva guerra mundial, a la que nos quieren llevar.
En sus últimos años de vida el gran revolucionario León Trotsky se empeñó en dejar sentadas las bases de una nueva internacional para la revolución socialista mundial, la IV, en su combate a la contrarrevolución de Stalin y la decadencia de la III. Ocupado en ello lo encontró, el 20 de agosto de 1940, el agente del estalinismo que le asestó el golpe mortal. Sin embargo, la historia no es obra de individuos aislados, ya sean héroes o villanos, por lo que la lucha de clases -por lo tanto, la lucha por la revolución socialista mundial- no se detuvo y la tarea que él dejó inconclusa quedó planteada como punto de partida para las siguientes generaciones de revolucionarios.
Desde entonces, la incipiente IV Internacional debió enfrentar enormes dificultades, sometida a las enormes presiones de una situación mundial de posguerra altamente novedosa y contradictoria, luego de la irrupción de la Revolución Rusa y el Estado Obrero, hechos que cambiaron el curso de la historia para siempre. El curso de adaptación a las instituciones de la democracia burguesa y las concepciones oportunistas de muchas corrientes que se reivindican trotskistas a nivel internacional se tornó un obstáculo para la perspectiva revolucionaria.
A 85 años de la desaparición física de nuestro principal dirigente, la crisis del sistema capitalista se profundiza cada vez más. Es tarea de los revolucionarios del siglo XXI recuperar el método legado por él y partir de la sistematización de su experiencia revolucionaria para continuar la lucha por el comunismo, combatiendo a nuestros enemigos de clase. Nuestro desafío se presenta hoy con enorme claridad: saldar la crisis histórica de la humanidad, que es la crisis de la dirección revolucionaria del proletariado.
Por la refundación de la IV Internacional
Desde la TRCI discutimos en nuestro reciente Congreso la necesidad de dar pasos concretos en este sentido e intentamos aportar desde la comprensión de esta compleja situación de decadencia imperialista, signada por un proceso de recesión de la economía mundial; la guerra entre Rusia y Ucrania, dos ex Estados Obreros; el avance de China en la economía mundial, otro ex Estado Obrero, y el desarrollo de un genocidio en Palestina. Las tendencias hacia una guerra generalizada se agudizan, pero no tendrá las características de las dos guerras mundiales anteriores. En este caso sería una guerra mundial en una fase de descomposición del imperialismo y de rapiña por definir cómo se integran los ex Estados obreros en proceso de asimilación. La situación está signada por una ruptura del equilibrio inestable, en la que seguro se abrirán procesos de lucha de clases más agudas. Debemos intervenir en las filas del proletariado con un programa transicional que plantee una salida revolucionaria a la masacre a la que pretenden llevarnos el imperialismo y sus aliados.
Es vital discutir de cara a las tendencias que reivindican la dictadura del proletariado para avanzar en la reconstrucción de la IV Internacional. Es necesario desarrollar una minoría revolucionaria organizada dentro del movimiento obrero para llevar adelante la tarea de la lucha programática por la revolución socialista. Desde la TRCI reivindicamos que es desde el programa de la IV Internacional, a partir de la sistematización y generalización de la experiencia de la Revolución Rusa que nos dejó Trotsky para seguir desarrollando la lucha por la revolución mundial en la época imperialista.
Únicamente las clases moribundas se ven obligadas a imponerle a la ciencia objetivos incompatibles con su naturaleza
Leon Trotsky, 1926
Del 23 de julio al 11 de agosto se realizó la exploración Talud IV del Schmidt Ocean – CONICET en el cañón del Mar del Plata, con observaciones in situ y colecta de especímenes mediante el ROV SuBastian, comandada por el equipo científico a bordo del R/V Falkor (too). Esto causó sensación por el uso de la tecnología y la trasmisión en vivo mediante streaming de alta calidad. Habitualmente, este tipo de campaña sólo despierta el interés de un pequeño número de personas pertenecientes al campo de las ciencias naturales o están relacionadas de alguna manera con la investigación científica, pero en Argentina se convirtió en una especie de fenómeno con visualizaciones que rondaron los 80k en su pico más alto, números muy poco habituales en lo que respecta al streaming en nuestro país. En parte como respuesta a las posiciones ideológicas anticientíficas del gobierno de Milei, en parte por hartazgo de los contenidos de los programas habituales de streaming que pululan en la web, un sector de las clases medias urbanas se sintió seducido por la propuesta. En un momento donde los propagandistas del gobierno intentan imponer una idea de ascenso social basada en la competencia individualista mercantil -idea obsoleta en la época de decadencia imperialista- esta franja de personas vuelve a oponer el conocimiento -o mejor dicho - la jerarquía del saber- como la tradicional vía de ascenso social, concepto que fuera extendido durante el boom de la posguerra con la masificación de las universidades europeas. Las altas visualizaciones generaron todo tipo de debates, donde particularmente un sector de científicos kircheristas, representado por Juan Emilio Sala, uno de los responsables del proyecto fallido Pampa Azul, cuestionaron la participación de capitales extranjeros – especialmente de la fundación del matrimonio Schmidt- como un atentado contra la “soberanía nacional” y la “ciencia nacional”. Si bien en líneas generales no se sabe exactamente los términos y condiciones del acuerdo del proyecto entre SOI y Conicet, el grupo de investigación ha dicho que el material colectado quedaría en el país mientas que el registro audiovisual sería propiedad de SOI. En este marco, llama la atención el nivel de hipocresía que maneja Sala y cía, principal sostén científico y político del acuerdo de Cabandié – Kichilof con las petroleas offshore – principalmente Shell y Qatar Petroleum - para la exploración sísmica del fondo oceánico a 300 km de la costa de Mar del Plata en el 2022 en búsqueda de petróleo. En el nombre de la “ciencia nacional” y la “soberanía” los científicos de Pampa Azul tuvieron un rol central en las audiencias públicas para entregarle la exploración marítima a las empresas imperialistas, cuestión que por ahora no viene prosperando ya que los resultados del primer intento fueron de “pozo seco”.
¿Existe una “ciencia nacional?
El sistema científico es internacional y, por tanto, obedece a las reglas impuestas por la ley del valor y la división internacional del trabajo. La demagogia kirchnerista y estatista sobre una “ciencia para el desarrollo nacional” es una abstracción en tanto y en cuanto no existe ni existirá un “desarrollo nacional” capitalista de nuestra semicolonia oprimida por el imperialismo. Pero no sólo eso. Esa idea de la investigación científica orientada “a la resolución de los problemas concretos del desarrollo nacional” en un país como el nuestro es cipaya por definición, ya que propone que las semicolonias se dediquen a la ciencia aplicada, mientras que la investigación básica sea propiedad de los países imperialistas. Si analizamos el sistema científico y su estructura, puede resultar más claro este problema
¿Quién financia tus investigaciones?
EE.UU. destina a la ciencia aproximadamente el 3.6% del PBI y la UE el 2.3%, mientras que América Latina sólo el 0.5. En esta región, los países que más invierten son Brasil, México y Argentina.
En Argentina, la gran parte del gasto ejecutado por el gobierno se canaliza a sueldos y transferencia a institutos/universidades, mientras que una proporción muy importante de financiamiento extranjero se usa mayormente para proyectos específicos de cooperación. En 2021, durante el “gobierno de los científicos” de Alberto y Cristina, los fondos estatales (organismos y universidades públicas) se destinaron en un 65% a sueldos de docentes e investigadores y 8% en gastos generales, mientras que sólo un 27% fue para proyectos de investigación. Esto significa que, si bien el Estado sostiene los sueldos de los trabajadores científicos (con un alto nivel de precarización mediante el sistema de becas), los proyectos de investigación son bancados en su mayoría por organismos multilaterales como el BID o por fundaciones y organismos de países imperialistas, lo cual, por supuesto, se realiza en base a las áreas de interés del capital extranjero.
A nivel mundial, si analizamos la distribución general por área, las ciencias exactas, naturales e ingenierías tienden a captar la mayor parte del financiamiento privado y de organismos internacionales, mientras que las ciencias sociales y humanidades reciben una mayor proporción de fondos de origen estatal directo.
En cuanto a países en vías de asimilación como China, más del 50% de la investigación en ciencias naturales y exactas es financiada por capital privado, mientras que las sociales lo son exclusivamente por fondos estatales.
En América Latina, las ciencias exactas reciben más apoyo de organismos multilaterales (BID, Banco Mundial, CAF) en proyectos de infraestructura científica o transferencia tecnológica, mientras que las sociales acceden más a convocatorias de cooperación internacional (UE, UNESCO, fundaciones). De esta manera, las metrópolis obtienen mano de obra barata para las I+D en materia de innovación tecnológica y en cuanto a las sociales para la investigación orientada a economía, administración o escuelas de negocios.
Para obtener el financiamiento de un proyecto científico, el investigador o el grupo debe presentarlo al organismo internacional a través, en nuestro caso, del CONICET, organismos descentralizados de CyT o las universidades. Luego, la solicitud es evaluada por una comisión compuesta por pares y si es aprobada, se brindan los fondos que son ejecutados por el organismo o una administradora (por ejemplo la ANPCyT que ha sido prácticamente desmantelada por Milei) En Argentina una gran parte de estos fondos provienen del BID, cuyas partidas han sido literalmente robadas por Caputo para sostener el supuesto equilibrio fiscal. Es decir, son estos organismos (BID, BM, ONGs fundaciones) los que determinan qué tema de investigación será sostenido con financiamiento.
Porcentaje del PBI destinado a la investigación científica y fuentes de financiamiento
Región |
I+D / PIB |
Empresas |
Gobierno |
Universidades |
EE. UU. (2022) |
≈ 3,6 % |
≈ 70,0 % |
≈ 18,1 % |
≈ 5 % (universidades + fundaciones) |
UE (2023) |
≈ 2,3 % |
≈ 57,7 % |
≈ 30,3 % |
≈ 1,2 % |
China (2022) |
≈ 2,6 % |
≈ 79,0 % |
≈ 17,8 % |
n/d |
América Latina y el Caribe (2023) |
≈ 0,5 % |
≈ 37 % |
≈ 56–57 % |
≈ 2 % |
Origen de los fondos destinados a la investigación en Argentina, México y Brasil
País (año) |
Gobierno |
Empresas |
Educación superior |
Fundaciones/ONG (p. s/fines de lucro) |
Sector externo/org multilat. |
Argentina (2021) |
58,6% |
21,1% |
1,3% |
0,8% |
18,3% |
Brasil (2021) |
53,8% |
43,2% |
3,0% |
≈0% |
n/d |
México (2021) |
77,4% |
17,0% |
3,2% |
1,4% |
1,0% |
Porcentaje estimado de origen del financiamiento (promedios internacionales)
(solo para proyectos de investigación, no incluye sueldos ni gastos operativos)
Área / Fuente |
Empresas |
Gobiernos |
Organismos multilaterales |
Fundaciones / ONG |
Exactas y naturales |
35–50% |
30–45% |
15–20% |
2–5% |
Sociales y humanidades |
5–10% |
70–85% |
5–10% |
5–15% |
Elaboración propia
¿A dónde van tus datos?
El objetivo de toda investigación, según el sistema imperante, es la publicación de los datos en una revista prestigiosa. Si antes la publicación era la culminación de una vida de trabajo por parte de uno o varios científicos, la idea de productividad capitalista fue desarrollándose de tal manera que hoy la publicación se ha convertido en un fin en sí mismo. En el caso de las ciencias exactas y naturales, el objeto de estudio es cada vez más acotado y parcial, y se busca obtener resultados publicables en el menor tiempo posible. Esto ha ido en detrimento de la capacidad de análisis de los científicos, donde la búsqueda de lo “novedoso” se ubica por encima del rigor científico. El desarrollo rápido de las tecnologías de procesamientos de datos y las IA y el boom del metaanálisis ha puesto de manifiesto los baches y debilidades del proceso. La especialización de la investigación científica es producto de la organización capitalista de la ciencia y el intento de aplicación de este modelo de organización a la naturaleza. De esta manera, la ciencia es mercantilizada y condenada al reduccionismo.
El sistema de publicaciones es internacional y está absolutamente regido por estas tendencias. Para que una revista sea considerada de prestigio debe estar inserta dentro de algún sistema de indexación, cuyas bases de datos las califica según criterios de pertinencia y visibilidad, revisión por pares e impacto en la comunidad científica. Entre las principales bases de datos se encuentran Web of Science (Clarivate Analytics) y Scopus (Elsevier). Uno de los mecanismos más utilizados para clasificar revistas es el sistema de cuartiles (Q1–Q4), que ordena las publicaciones según un indicador de impacto (Journal Impact Factor (JIF) en Web of Science o el CiteScore en Scopus). Las del primer cuartil (Q1) son las más leídas y citadas. En el caso de los investigadores de CONICET del área de las naturales y exactas, para poder aprobar sus informes periódicos, deben garantizar una publicación Q1 por año.
En cuanto a derechos de autor, el modelo tradicional de suscripción implica que los autores ceden los derechos de publicación a la editorial y, a cambio, la revista asume los costos de edición y difusión. En este sistema, los lectores (o sus instituciones) pagan para acceder a los artículos. Por el contrario, en el modelo open access, los artículos son de libre acceso, pero los costos de publicación se trasladan a los autores o a sus instituciones mediante el Article Processing Charge (APC), que oscila entre los USD 1.500 y USD 5.000 por artículo. En todos los casos, las revistas se quedan con el 100% del cobro de la APC y los autores no perciben ingresos por la publicación, salvo excepciones en libros o artículos con regalías especiales, que son muy poco comunes. Las revistas más prestigiosas actualmente utilizan ambos modelos (híbridas) y se quedan con el copyright de los datos publicados por los científicos. En otras palabras, si querés conservar tus derechos sobre tus datos, tenés que pagar (y en dólares)
De todas maneras, pagues o no, tus datos dejan de ser tuyos en el momento en que son publicados, y si bien es obligación citar la autoría, pueden ser utilizados a gusto y piacere por estados, organismos y empresas según su interés, sin que recibas un centavo por ello.
O sea, no hay nada “nacional”
Todas estas cuestiones demuestran que, aunque el estado te pague el sueldo, tus investigaciones dependen del capital extranjero. Parte de tu tarea entonces, es ser un “vendedor” de la importancia de tu investigación ante éste, competir con otros investigadores por los escasos recursos, y, si haces ciencia básica, demostrar que tu tema es central para acabar con el hambre en el mundo o enfrentar el cambio climático.
Tampoco es cierto que los proyectos sostenidos por el estado argentino apunten al “desarrollo nacional”. Pampa azul, por ejemplo, demuestra que no es así.
Es un hecho reconocido por todos que los temas científicos de interés son seleccionados por los organismos o empresas financiadoras internacionales, imponiendo la llamada “agenda” de investigación. Sin embargo, esto tiene un alcance mucho mayor del que se cree. El capitalismo ha moldeado la ciencia según sus necesidades y bajo sus propias reglas. Si el objetivo de la ciencia es “hacerse preguntas”, estas preguntas son necesariamente resultado de la organización social de la producción. El capitalismo no sólo te “selecciona” las preguntas, sino que te las dicta en voz baja en tu oído sin que te des cuenta. La visión burguesa individualista y elitista que predomina entre la comunidad científica impide, entre otras cosas, que lo trabajadores científicos se reconozcan como tales y puedan sacar conclusiones de esto.
La dicotomía falsa entre una ciencia al servicio de los países ricos vs una ciencia al servicio de los intereses nacionales sólo sirve para enmascarar que la ciencia no puede escapar de las leyes del capital, ya que se encuentra directa o indirectamente ligada a la producción capitalista. También aplica para las ciencias sociales. Así estudies las tradiciones de un pueblo originario, tu investigación no tiene un “carácter nacional” puesto que se encuentra regimentada por el capital imperialista. Hacer ciencia es un proceso social, y por lo tanto no puede escindirse de la organización social.
Proponer como alternativa “una ciencia al servicio del desarrollo nacional”, es encerrar al pensamiento científico en los estrechos márgenes de un estado nacional y de fronteras nacionales. No sólo es utópico, sino va en contra de su naturaleza.
Los trabajadores científicos no necesitan estar preocupados por las aplicaciones prácticas de su investigación. Mientras mayor sea su alcance, mientras más audaz sea su vuelo, mientras mayor sea su libertad de las necesidades prácticas más oportunidades tendrá de desarrollarse. Pero la ciencia no es una función de científicos individuales; es una función social. La lucha por una nueva organización social, basada en la economía planificada y la racionalización de las relaciones humanas, sometiéndolas a la razón armada con la ciencia, es la lucha por el socialismo y la única forma de romper las cadenas que atan al pensamiento científico y que socavan el fundamento mismo de la ciencia.
Desde la COR saludamos al plenario y adherimos al mismo. Estas instancias son importantes para debatir las tareas de los sectores activistas y de vanguardia ante la situación internacional y nacional y discutir un programa transicional que prepare las condiciones para la lucha por el poder.
Milei, como representante directo del imperialismo y el FMI, nos está llevando a una nueva crisis e intenta infringir una derrota histórica a nuestra clase para salvar a la parásita clase burguesa. Los cierres de fábricas, los despidos, las suspensiones y la pauperización del salario son expresión de esto. Para esta tarea cuenta con la complicidad de todos los partidos patronales, entre ellos el peronismo y la burocracia sindical de la CGT y CTAs.
Por eso debemos abrir un debate al interior de nuestra clase sobre cuál es la salida revolucionaria a esta crisis. Nosotros estamos convencidos que esa salida no pasa por defender a CFK, ni por apoyar frentes anti Milei y menos por salidas parlamentarias o escenarios electorales.
Ante la desorganización de la economía, los trabajadores debemos organizarla sobre nuevas bases, por eso es central recuperar el programa de transición, que es un programa que ataca a la burguesía en su raíz, es decir, en la producción. Tenemos que discutir el control obrero de las ramas de la economía, imponer la escala móvil de horas y salarios, el monopolio del comercio exterior ante la apertura de la economía. Todas estas medidas transicionales, que no son socialistas, preparan las etapas de la dictadura del proletariado comenzando por la desorganización de la burguesía y la organización del proletariado para la revolución.
Consideramos que es esencial que este plenario abra este debate y se plantee como tarea combatir al estatismo y al redistribucionismo que pululan en los programas sindicales y generan confusión en la vanguardia. La salida comienza planteando la independencia de clase para desarrollar Oposiciones Sindicales Revolucionarias que disputen la dirección a la burocracia y su conciliación de clases. Debemos impulsar un Congreso de delegados de base con mandato, de trabajadores ocupados, desocupados y jubilados, para preparar e imponer un paro general por el triunfo de todas las luchas en curso. Sentemos las bases para construir la dirección revolucionaria, organizada en partido como sección nacional de la IV Internacional reconstruida.
No al pago de la deuda externa. ¡El FMI, afuera!
¡Abajo Milei! Derrotemos el ajuste del imperialismo, Milei y los gobernadores. Por un gobierno obrero.
Por el triunfo de todas las luchas obreras. Impulsemos la solidaridad de clase en todos los lugares de trabajo.
Por un Congreso de delegados de base con mandato de trabajadores ocupados y desocupados. Impongamos a la CGT y las CTAs el Paro General.
Frenemos el genocidio sionista en Gaza.
El 6 y 7 de agosto los trabajadores de CONICET llevaron adelante un paro a nivel nacional; en Córdoba estas jornadas estuvieron marcadas por acciones el día 6, acompañando la 70 ronda de jubilados, y el 7 con cortes totales en seis accesos de ciudad universitaria, acompañados de clases públicas, una radio abierta y una olla popular cerrando con un nutrido acto. Los cortes coincidieron también con las 48 hs de paro de ADIUC (gremio docente) del 7 y 8 de agosto. Esta acción de los cortes fue votada en una asamblea autoconvocada de más de 400 trabajadores de CONICET y viene siendo preparada junto a docentes, estudiantes, la JI de ATE Conicet, ATE no docentes, la lista opositora de Adiuc roja y negra y organizaciones de izquierda hace algunas semanas. El resultado fue una acción contundente que mostró que hay un activismo dispuesto a dar la pelea por su salario y sus condiciones de trabajo y estudio.
El conflicto universitario abierto el año pasado no se ha cerrado, por más intentos que hayan hecho las direcciones para dispersarnos, porque las condiciones de trabajo y de estudio no han hecho más que empeorar. El deterioro salarial que ya llega al 50% con respecto a 2023, los nulos aumentos durante junio y julio, junto al insultante aumento por decreto que firmó Milei del 7,3 en minicuotas hasta noviembre, sumado al deterioro de las condiciones de cursado que está profundizando la elitizacion de las universidades son ataques que están encontrando una resistencia. Así lo demostró el plan de lucha que votaron los docentes con la no toma de exámenes y paros progresivos por semana hasta llegar a la semana nacional de paro del 11 al 15 de agosto.
El CIN y la burocracia sindical salieron a festejar la media sanción en diputados de la Ley de financiamiento educativo y pretenden una vez más llevarnos a confiar en las instituciones podridas del régimen y no en nuestras propias fuerzas. Esta ley hecha a la medida de las exigencias del FMI para la educación, consolida las pérdidas salariales de los gobiernos de Macri y Alberto (plantea una recuperación de salarios solo al 2023) y un presupuesto mucho menor al de la ley vigente, 1,3% a alcanzar en 2031. Bajo el lema abstracto de “defensa de la educación”, la burocracia y las conducciones pro-patronales estudiantiles nos están llevando a la derrota, haciendo frente común con las autoridades que vienen aplicando el ajuste y llevándonos a esperar los tiempos del congreso, sus sesiones y hasta de los anunciados vetos de Milei. Debemos dar una pelea por recuperar la orientación y la dirección del conflicto.
A pesar de que la motosierra y la licuadora anduvieron a toda marcha, el último informe técnico del FMI reclama más ajuste y privatizaciones. A esta altura ya no queda duda que nos gobierna el imperialismo y que Milei no es más que su marioneta. Mientras tanto los K, el PJ, los diluidos restos que quedan del PRO y la UCR, junto con la burocracia sindical intentan contener la bronca y meter todo en el escenario electoral de octubre sin demasiado éxito por ahora.
Es que los trabajadores, luego de un año y medio han comenzado a sacar sus balances de este gobierno antiobrero y de quienes lo sostienen. Los trabajadores universitarios y los estudiantes debemos prepararnos, no para mendigar favores de los que llevan adelante el ajuste, sino para enfrentar la crisis a la que nos están arrastrando. Nuestros aliados los vamos a encontrar en las lucha del Garrahan, de los trabajadores de Tierra del Fuego, de los docentes en todo el país, de los metalúrgicos, y especialmente en este momento en la lucha de los petroquímicos de Río III (PR3), que con la ocupación de planta que llevan adelante están mostrando un método para enfrentar los despidos. Debemos apostar a que los trabajadores de PR3 triunfen. El lunes 11-08 a las 11 hs están llamando a una concentración en la puerta de la fábrica; preparemos el apoyo desde la UNC haciendo activo el paro del lunes, exijamos a las conducciones de la ADIUC, la Gremial San Martín, los centros de estudiantes y la FUC que pongan colectivos para ir.
Enfrentar a Milei también significa enfrentar al imperialismo que lo sostiene. El plan aventurero del imperialismo con Trump a la cabeza está acelerando un escenario de guerras y crisis económica a nivel mundial. En este momento enfrentar el genocidio en Gaza a manos del enclave imperialista de Israel debe ser una tarea que tome el conjunto de los trabajadores y la juventud. En la UNC debemos desarrollar una campaña en contra del genocidio en Gaza, propagandizando los métodos obreros y de la juventud como el bloqueo en los puertos, las tomas de facultades y dando la pelea por romper todos los acuerdos que mantiene la universidad con las empresas y las instituciones sionistas de Israel. En la pasada asamblea estudiantil de la FFyH del 06/08 esto ya se votó pongamos manos a la obra para desarrollarla.
Debemos dar respuesta urgente a la confusión de objetivos y la dilación de las acciones a la que nos arrastran las conducciones en el actual conflicto universitario. Necesitamos recuperar nuestras organizaciones desarrollando oposiciones revolucionarias en su interior que enfrenten a la burocracia y las divisiones que nos imponen. Recuperemos los Centros de Estudiantes y la FUC. Recuperemos los sindicatos de docentes y no docentes y luchemos por poner en pie un sindicato único de trabajadores universitarios y de ciencia y técnica.
Pongamos en pie un Plenario de Delegados de base mandatados de docentes, no docentes, investigadores y estudiantes para discutir el pliego de reclamos y el plan de lucha para imponerlo que incluya las tomas de los edificios y los paros activos y preparar junto al resto de los sectores educativos en lucha un gran Paro Educativo Nacional.
. La embestida patronal contra los trabajadores de Petroquímica Río Tercero (PR3) sumó un nuevo capítulo el pasado miércoles 6 de agosto, fecha de pago de los salarios. La patronal presentó una extorsión al Sindicato Químico y Petroquímico de Río Tercero (SPIQyP Río III), proponiendo pagar solo el 50% de los salarios a cambio de que los trabajadores depongan la lucha contra los 124 despidos que la empresa efectuó a mediados de julio. Frente a la negativa obrera a aceptar los despidos, la patronal anunció y cumplió el no pago de la totalidad de los salarios, incluyendo a todo el personal. Recordemos que la secretaría de trabajo provincial de Omar Sereno impuso una Conciliación Obligatoria (CO) por la cuál todos los trabajadores tienen acceso a la planta, pero con la particularidad de que la empresa no les da tareas al haber parado a cero la producción, es decir, mantiene un lock out patronal ofensivo, a lo que ahora se suma el no pago de salarios. La CO sirve de cobertura al lock out y ayuda a la patronal en su estrategia de desgaste, demostrando una vez más el rol de la secretaría de trabajo en cada conflicto, jugando siempre para los empresarios. La empresa tiene en curso un Concurso Preventivo de Acreedores solicitado ante el tribunal en lo Comercial N.º 23 de la Ciudad de Buenos Aires y apuesta a ganar tiempo para meter a los salarios e incluso a las indemnizaciones devengadas en el barro del concurso de acreedores.
Frente a la nueva ofensiva que constituye el no pago de haberes, los trabajadores de PR3 definieron mantenerse firmes dentro de planta, superando la intentona de la policía provincial de Llaryora de impedir el ingreso del turno noche el mismo 6/8. La ocupación de la planta cobra vital importancia ya que plantea prácticamente el problema de saber quién es el dueño de la fábrica: el capitalista o los obreros; permite a los trabajadores ganar una posición de fuerza, aunque sea temporalmente ya que sabemos que la clase capitalista y las instituciones represivas del Estado a su servicio no pueden permitir esta afrenta a los “sacrosantos valores” de la propiedad privada de los medios de producción. Pero la pelea de PR3 no se da en el vacío, sino en medio de una profundización de la crisis capitalista a nivel internacional y de la crisis industrial pronunciada que atraviesa nuestro país como consecuencia de la política del gobierno del FMI que encabeza el títere Milei. La importancia de la lucha de los químicos de Río Tercero es que están mostrando un método para enfrentar los despidos a nivel nacional en medio de la crisis producida por la recesión y la apertura de las importaciones. La ocupación debe ser planteada como un hecho político que apueste a desarrollar una ola de ocupación de fábricas en todo el país; es sobre esa tendencia que la lucha de los trabajadores PR3 adquiere su dimensión y tiene posibilidades de desarrollarse en una perspectiva de triunfo.
Algunos sectores sindicales, que van desde la burocracia de la CGT a sectores combativos y al centrismo trotskista, caracterizan la apertura de importaciones y en general la política de desregulación económica de los nefastos ministros Caputo y Sturzenegger como una ofensiva contra la llamada industria nacional que llevaría a un “industricidio”. La realidad es que las patronales, tanto nacionales como imperialistas afincadas en Argentina, continúan aplaudiendo las medidas del gobierno y se aplican a reconvertir sus fábricas en centros de logística para el acopio y distribución de esas importaciones. No hay industria nacional que defender, lo que debe ser defendido son los salarios y las condiciones de trabajo de la clase obrera, que son el verdadero blanco de la política pro imperialista de Milei y su pandilla de ajustadores. A viva voz, la UIA, las Pymes, la AmCham y demás cámaras patronales plantean que “para poder competir” necesitan el avance de la reforma laboral. El objetivo del gobierno con su política es ponernos a competir con la clase obrera del resto de los países para bajar, acá y allá, los salarios y las condiciones de trabajo. Es por eso que debemos plantear, junto con el control obrero de las ramas como forma de mostrar el poder obrero y la capacidad de nuestra clase de enfrentar la desorganización de la economía capitalista, el Monopolio del Comercio Exterior, no como una medida nacionalista para unirnos a la burguesía nacional contra la producción extranjera, sino como una herramienta del poder obrero para defender a nuestra clase, en alianza con los trabajadores del resto del mundo, contra los ataques del imperialismo y sus socios menores.
Para combatir la ola de despidos y el aumento de la desocupación, que va de la mano con la degradación de las condiciones laborales para imponernos el pluriempleo y/o la extensión de las jornadas a 10, 12 o más horas, tenemos planteado imponer las escalas móviles de horas de trabajo y salarios a partir de nuestros métodos de lucha y de nuestras organizaciones: el control obrero y las organizaciones sindicales recuperadas de la burocracia. Las escalas móviles plantean, frente a la anarquía económica que imponen las leyes del capital, la transición al sistema de trabajo de una sociedad socialista, donde la producción se organice sobre nuevas bases sociales.
La lucha de los químicos de PR3 tiene que triunfar. Para eso, necesita la solidaridad del conjunto de la clase obrera y de los luchadores de Córdoba. Ante cualquier atisbo de desalojo, el movimiento estudiantil combativo que despuntó con la lucha universitaria del año pasado tiene planteado tomar las facultades. Y lo más importante, los sindicatos, juntas internas y cuerpos de delegados recuperados y los activistas combativos tenemos el compromiso de llevar esta discusión al interior de nuestros lugares de trabajo. Debemos discutir como enfrentar los despidos, el ataque al salario y a las condiciones de trabajo, para apoyar a los químicos de Rio Tercero y también para poner en pie de lucha al conjunto de nuestra clase frente a los ataques de las empresas, el gobierno nacional y los gobierno provincial y locales, con la complicidad de la burocracia sindical de las CGTs y las CTAs. Impulsemos asambleas en cada fábrica, escuela y lugar de trabajo; mocionemos un Congreso de Delegados con mandato de base de todo el movimiento obrero de Córdoba para discutir un programa y organizar el plan de lucha y el paro provincial.
Este jueves 31 de julio se realizó en San Luis una marcha convocada principalmente por los gremios ATE, Sijupu (judiciales), APTS (Salud), SIEP (municipales) Utep y Asde (docentes).
Marcharon también delegaciones de trabajadores y estudiantes del IFDC de San Luis y Villa Mercedes, jubilados y trabajadores autoconvocados de distintos gremios aunque sus conducciones no adhirieron ni quisieron convocar (como el caso de AMET). Hubo también una delegación de la CGT apoyando aunque desde los números fue casi testimonial.
Desde la COR acompañamos y fuimos parte de una delegación de “Docentes de Base en lucha” que se movilizó desde Villa Mercedes para decir presente y hacerse sentir en la marcha.
El motivo principal fue el reclamo por recomposición salarial en un escenario donde los trabajadores estatales vienen sufriendo la perdida constante de poder adquisitivo y de sus condiciones de vida producto del ajuste de Poggi y la precarización laboral ya impuesta durante el anterior gobierno de Alberto Rodriguez Saá y profundizada por el actual Gobierno.
ATE, APTS, UTEP y Sijupu (quien puso a disposición transporte en colectivos a Villa Mercedes para trabajadores de otros sectores, algo a destacar) fueron los gremios que mostraron sus columnas mas nutridas, se marchó como hace un tiempo no se veía por el centro de San Luis, con buen ánimo y sin registrarse incidentes.
La marcha terminó en la sede del Correo donde estuvo el palco para los oradores que fueron los principales gremios convocantes, allí se le negó la posibilidad a agrupaciones como docentes de base en lucha y otros sectores de autoconvocados de decir algunas palabras por un acuerdo previo de las conducciones, actitud que es un silenciamiento hacia sectores que habían militado la preparación de la marcha y movilizaron desde distintos lugares de la provincia.
Desde el costado del palco fuimos parte de un agite reclamando Paro provincial y general, cosa que se notó que no gustó mucho a los oradores.
La continuidad del plan de lucha. Dos estrategias distintas para debatir
Fue muy claro desde los discursos de los oradores la crítica a la política de Poggi y su ajuste, la falta de mesas paritarias, que los aumentos se dan por decreto, y que esto impacta negativamente en la situación de los trabajadores de San Luis, lo que ninguno alcanzó a decir es que esto es lo mismo que se le reclamaba a Rodriguez Saá durante sus años de gobierno, ya que nunca otorgó paritarias a los gremios.
Si bien los porcentajes de aumento por decreto eran un poco mejores, en un contexto donde no había tanto apriete fiscal desde el gobierno nacional, jamas convocó a mesas paritarias a no ser que fueran para tratar de negociar mayor precarización de las condiciones laborales y modificaciones retrogradas en los estatutos vigentes.
El plan del Frente de gremios estatales es presentar un proyecto de Ley en la Legislatura para pedir una Ley de Paritarias, que obligue al Gobierno a llamar a una mesa de discusión salarial.
Y una vez mas como lo hacen las centrales sindicales a nivel nacional, quieren que los trabajadores depositen la confianza en la cueva de ladrones que en este caso es la Legislatura, así como lo es el Congreso a nivel nacional.
Con esta formula ya conocemos los negativos resultados que hemos tenido en estos años de Gobierno de Milei y los Gobernadores que apoyan su ajuste como Poggi.
Los próximos pasos a seguir entonces serán una nueva movilización esta vez a la legislatura provincial cuando presenten el proyecto de Ley, para lo cual se van a apoyar en los legisladores del PJ, los mismos que históricamente estuvieron en contra de que hubiera paritarias, por lo cual ya hay un alto nivel de delirio.
Tratan con esta estrategia de contener los reclamos genuinos de los trabajadores y canalizarlos a una vía institucional que ya demostró que no es eficaz. Nada bueno puede salir para los trabajadores con esta política gremial.
La lucha de los trabajadores debe llevarse desde una perspectiva de independencia de clase de los partidos patronales, ni del lado de Poggi, ni del lado del PJ. Solo debemos confiar en nuestras propias fuerzas.
Hay que aprovechar el empuje que puede generar esta movilización que se gestó por la bronca de las bases trabajadoras para exigir asambleas a las conducciones sindicales y reorganizarnos desde nuestros lugares de trabajo, dialogar y discutir con las compañeras y compañeros que todavía no se deciden a encarar la lucha para organizar mejor y con mas fuerza los pasos a seguir.
Es alto el numero de compañeros en la provincia que se han desafiliado de los sindicatos por diferencias con la actitud indolente y muchas veces traidora de algunas conducciones gremiales, pero esa linea de desafiliación se ha demostrado impotente ante los ajustes de los Gobiernos. Hay que llevar adelante campañas de afiliación para engrosar las filas gremiales.
No se trata de volver a los sindicatos apoyando ciegamente a las actuales conducciones gremiales sino de forjar una vida interna dentro de los sindicatos que permita que se desarrollen nuevos activistas y dirigentes para enfrentar los nuevos procesos de ajustes por venir.
Que se plantee el cuestionamiento y que se formen oposiciones sindicales con el objetivo de recuperar los sindicatos para la lucha allí donde sea necesario.
Los sindicatos son nuestra forma mas elemental de organizarnos eficazmente para la lucha, costó años y décadas a nuestra clase que fueran reconocidos por las patronales y gobiernos.
Mientras mas fuertes y mayor poder de organización tienen, en lineas generales, en mejores condiciones están los trabajadores. No es casualidad que el discurso de quienes vienen atacando a la clase obrera es que los gremios no sirven y que la salida es individual.
Hay que organizarse en cada lugar de trabajo y de estudio en asambleas que voten delegados con un mandato de base para confluir en Gran plenario de delegados estatales que debata y determine un plan de lucha contra el ajuste.
Por un salario básico para la categoría inicial (sin contar antigüedad o items extra) igual a la canasta de bienes y servicios hoy en $1.600.000 pesos!
Por una clausula gatillo automática que indexe los porcentajes de inflación al sueldo!
Pase a remunerativo de todos los ítems no remunerativos del recibo de sueldo!
Que ningún trabajador estatal cobre menos que estos salarios!
Estatales de la COR
San Luis
Descargar las Tesis del III Congreso de la TRCI
El pasado jueves la patronal de Arcor- Bagley Villa mercedes despidió al compañero Sergio Montivero, ultimo candidato a Secretario General de la lista Azul y Blanca por la oposición en las pasadas elecciones del Stia San Luis.
En un claro comportamiento antisindical la empresa lo despide argumentando incapacidad laboral y por ello no tener posibilidad de encontrarle un puesto de trabajo en su sector.
El compañero retornaba de una operación de la columna, parte de las enfermedades laborales que sufren por el tipo de trabajo los trabajadores de hornos y elaboración de la masa. Volvía con un alta definitiva para realizar tareas normales pero los médicos patronales desconocen el certificado del médico que lo operó, sin siquiera realizar una junta médica para que se desentrañe esta farsa.
Es tan desleal y fraudulento el accionar patronal y como falazmente “no tiene un puesto de trabajo acorde”,que hasta invoca el articulo 212 de la Ley de Contrato de trabajo, argumentando una mentirosa baja de trabajo en la planta (como si hubiera una crisis productiva, aunque sus ganancias se han aumentado exponencialmente desde la pandemia en adelante) para abonar solo la mitad de la indemnización.
El proyecto de barrer a los delegados combativos y toda oposición a la burocracia Verde en el STIA.
El despido se constituye como un claro acto antisindical por la patronal, que viene desplegando hacia el interior de la fábrica una campaña de persecución contra todo el activismo y los compañeros ligados centralmente a la lista Azul y Blanca, ya que son quienes accionaron siempre para defender a los trabajadores contra las injusticias patronales y las usuales agachadas de la oficialista Lista Verde.
La lista azul y Blanca ademas de su correcta tarea gremial en la fabrica, históricamente es la que se ha solidarizado activamente con procesos de lucha en otras fabricas de la alimentación en la provincia (Arcor- Estirenos, Mondelez, etc) y fuera de ella (Bagley Cordoba). Así como también con trabajadores de otros gremios (Pagoda, Tersuave, Danica, por nombrar algunas).
Producto de este accionar estuvo en un par de elecciones a escasos votos de arrebatarle la conducción del gremio a la Lista verde. Quien tuvo que recurrir a distinto tipo de fraudes electorales para evitarlo.
Los delegados de la Azul y Blanca Son quienes organizaron la resistencia activa de los trabajadores y el paro de la producción ante la desidia patronal en la pandemia del COVID durante el pico de contagios.
Por ello se entiende como en esta situación de avanzada patronal sobre los derechos laborales es que se determina el despido de Sergio, uno de los principales referentes de la Lista.
Por todo esto es que la la conducción del Stia San Luis y su secretario General Bianchi muestra que es parte de este plan, ya que no solo no ha llamado una sola asamblea ni ha hecho ninguna declaracíon por el despido del compañero, que desde ya esta visto que le queda cómodo, así como tampoco con todas las rebajas que se vienen dando en las condiciones laborales del conjunto de los trabajadores de Arcor Bagley (despidos, suspensiones, mas precarización).
La situación General y la necesidad de la lucha.
La política antiobrera del Gobierno Nacional de Milei, sumado al acuerdo con todos los gobernadores no importa de que bandería política (PJ, Pro, LLA y otros) es la de desterrar cualquier tipo de resistencia al ajuste sobre las condiciones de vida de la clase trabajadora.
Y para ello cuentan con la ayuda de la burocracia sindical que por acción u omisión se encarga de convencer y asegurar la derrota de la clase obrera a cambio de mantener sus privilegios y su participación en los negocios patronales.
Pero tanto látigo que viene aplicando mas temprano que tarde se les volverá indefectiblemente en su contra, compañeros de distintos sectores están comenzando a retomar los métodos de la clase trabajadora para enfrentar los despidos, las suspensiones y el ajuste presupuestario.
Hay que tomar como referencia a las y los compañeros del Garrahan, de Georgalos, de Secco, los estatales de varias provincias, y muchos otros que aún en este escenario tan adverso se ponen de pié y no le esquivan a la pelea.
En Arcor Bagley Villa Mercedes es fundamental comenzar a debatir y poner en pié un plan de lucha contra el despido antisindical del Compañero Sergio Montivero, quien esta en campaña por su reincorporación al lugar de trabajo. No forjar una lucha a la altura de esta provocación patronal le allanaría el camino para avanzar con la persecusión y los aprietes que sufren día a día todos los trabajadores de la fábrica.
Es momento de realizar asambleas por turno y en cada Sector de trabajo para revertir el plan patronal.
Por la reincorporación del compañero Sergio Montivero!
Para frenar los despidos discriminatorios en Arcor Bagley!
Para discutir y exigir el aumento salarial que haga que no se dependa de las horas extras que la patronal usa de manera extorsiva y discrecional!
Por imponerle a la patronal la mejora en las condiciones Higiene y Seguridad!
Por la coordinación con otros sectores laborales que están saliendo a la lucha!
Por un congreso de delegados de base del parque Industrial, de trabajadores del sector servicio y Estatales que defina medidas para enfrentar el ajuste patronal!
Marcos Reinoso
COR- San Luis
Por el triunfo del Garrahan y todas las luchas en curso
Por una salida obrera a la crisis
El gobierno sigue avanzando en el desmantelamiento del sistema de salud argentino, que siempre se referenció en el sistema europeo del Estado de bienestar, para reemplazarlo por un sistema similar al de EE. UU. en el que cada hospital es una empresa que vende servicios y debe competir en el mercado. Los dos modelos están en función de los intereses capitalistas, el primero haciendo al Estado burgués garante de la salud de la fuerza de trabajo para su explotación, el segundo remplazando al Estado por el empresario de la “industria de la salud”. Ambos, son ajenos a las necesidades del pueblo trabajador, cuya salud no les importa, y sólo buscan maximizar las ganancias capitalistas.
El gobierno de Milei nos está conduciendo a una nueva crisis, con la que pretende imponer una nueva relación de fuerzas favorable a los grandes capitales y el imperialismo y descargar el ajuste a los trabajadores activos, pasivos y al conjunto de la población. Todos los partidos patronales y la burocracia sindical, aunque se pinten de opositores (como intentaron ubicarse los gobernadores ahora en el Senado) o hagan discursos en pos de otro tipo de “Estado mas eficiente”, como postulan los K y los Kicillof, coinciden en dejar pasar el ajuste. Con la contención de la CGT, buscan mecanismos para llevarnos a un escenario electoral sin enfrentar el plan de Milei y el FMI en los lugares de trabajo y en las calles.
Pero a estos defensores del Estado burgués y sus instituciones se les está complicando la defensa de la burguesía, ya que desde el primer día de gobierno de Milei importantes sectores de activistas y combativos le damos pelea en las estructuras de trabajo y en las calles con grandes movilizaciones y enfrentamiento con las fuerzas represivas. Esa resistencia ha impedido afianzar un régimen político en base a una derrota de las masas y que surja una base social sostén del gobierno para imponer su política. Los procesos de lucha de clases abiertos, en un escenario mundial de crisis económica y procesos guerreristas, están complicando los planes del gobierno y el imperialismo. Pero este escenario no puede mantenerse a largo plazo, no sólo por el hecho de que si se mantiene este gobierno se va a acelerar la pauperización de las condiciones de vida, sino porque no debemos permitir que continúe este ataque y debemos prepararnos para enfrentarlo y derrotarlo con los métodos de la clase obrera.
Para este objetivo debemos ser claros, no son nuestros aliados ni Cristina, ni Axel y menos que menos la burocracia sindical y los partidos que representan. Debemos confiar en nuestras propias fuerzas y postularnos como dirección revolucionaria conformada en partido, que acaudille a la nación oprimida.
Ante la desorganización de la economía podemos plantear algunas medidas transicionales como el control obrero de las principales ramas de la economía. Para poner un ejemplo, no podemos dejar YPF en manos del Estado burgués y sus expropiaciones truchas, debemos ponerla bajo control obrero. Debemos imponer la escala móvil de horas y salario como medidas transicionales que desarrollen la injerencia del Estado obrero en la sociedad capitalista. Tenemos que recuperar los sindicatos y echar a patadas a la burocracia y ampliar las funciones de los sindicatos en la administración de las cosas. Tenemos que abrir un debate programático al interior de nuestra clase y relacionar las demandas por salario, contra los despidos, las suspensiones y los cierres de fábricas con la necesidad de un programa de transición que ataque las bases productivas de la burguesía y la desorganice como clase para derrotarla.
Impulsemos el plenario nacional del movimiento obrero combativo ocupado y desocupado del 16 de agosto votando delegados con mandatos de base.
¡Abajo el gobierno de Milei!
Aumento salarial, canasta básica $ 2500000, como plantean los trabajadores del transporte.
Por el triunfo del Garrahan y todas las luchas en curso como Georgalos, Secco, Morvillo, Petroquímica de Río Tercero, entre otras.
Impongamos un paro general activo.
Por un congreso de delegados de base con mandato.
Por un gobierno obrero.
Por el triunfo de la lucha del Garrahan
El gobierno sigue avanzando en el desmantelamiento del sistema de salud que existe en Argentina, que siempre se referenció en el sistema europeo del Estado de bienestar, para reemplazarlo a un sistema similar al de EE. UU. en el que cada hospital es una empresa que vende servicios y debe competir en el mercado. Ambos modelos de sistemas son variantes del sistema capitalista que buscan mantener ciertas condiciones de salud de las fuerzas de trabajo para mejor explotarla, por eso son ajenos a las necesidades de las grandes mayorías de la población, ya que sólo buscan ganancias en la atención de la salud.
A esta característica debemos sumarle que la Argentina es una semicolonia y que depende del imperialismo norteamericano, ya que no es independiente para definir sus políticas. El gobierno de Milei se asienta más directamente en el imperialismo por lo que el ataque es más directo a la salud ejerciendo una dictadura del capital con métodos de dictadura policial. Aunque parezca que es una fortaleza del gobierno es una de sus mayores debilidades ya que no se asienta en una base social firme, sino en las instituciones en un semi estado que depende de un imperialismo en descomposición.
Por eso es importante que el paro del 10 y el abrazo fortalezcan la unidad de los trabajadores en el hospital, que se sumen al paro los residentes y así confiar en nuestras propias fuerzas y no en los jefes y coordinadores que son la correa de transmisión junto a la burocracia sindical de UPCN y Ate verde de los directivos y el gobierno. Hay que echar a la administración del Hospital y más cuando ahora se suma el Dr. Mariano Pirozzo como nuevo director Médico de la institución, que viene de desmantelar el Bonaparte, y ponerlo bajo control obrero.
Es importante que preparemos una gran movilización a Plaza de Mayo el 17/7, para que demostremos que la lucha del Garrahan es una causa nacional y, desde la plaza y ante los trabajadores de la salud, hagamos un llamado a Lugones para una reunión en el Garrahan, sin ministerio de trabajo ni burócratas, con una Comisión de trabajadores encabezada por la Junta Interna de ATE, la Asociación de Profesionales y representantes votados en asamblea para destrabar el conflicto.
Es vital impulsar, apoyándonos en la fortaleza que se ha ganado el conflicto del Garrahan ante los trabajadores y parte de la sociedad, un Plenario de delegados de la Salud a nivel nacional con mandato de base, que vote un plan de lucha de toda la rama, que no sólo plantee la necesidad de una recomposición salarial y se pronuncie en contra la política del gobierno y en defensa de los residentes, sino que también abra un debate al interior de los trabajadores de la salud sobre la necesidad de una salida obrera a la crisis del sistema de salud.
Aumento salarial, canasta básica $ 2.500.000, como plantean los trabajadores del transporte.
Rechazo al plan del consejo de administración.
Por la defensa de los residentes
Por el pase a planta de todos los contratados.
Exigimos un régimen por insalubridad: Un régimen especial, licencias por estrés de 15 días hábiles, reducción de la jornada laboral sin afectar el salario, reducción de los requisitos jubilatorio.
Publicado en TRCI
A comienzos del mes de junio los estudiantes universitarios cubanos iniciaron un plan de lucha en protesta contra el incremento de las tarifas de acceso móvil a Internet en la isla. En su declaración, plantearon que estas medidas perjudican la justicia social y aumentan las brechas sociales al limitar el derecho a la comunicación, recurso esencial para estudiantes y profesores. Es importante que los sectores estudiantiles que están luchando en todo el continente contra los ajustes de sus gobiernos levanten la solidaridad con ellos.
Esta lucha expresa el enorme descontento que se vive en Cuba ante una tendencia decadente del régimen, que el gobierno de Díaz Canel no puede revertir. Desde el 11 de julio de 2021, fecha considerada como un punto de quiebre entre un sector de masas de la sociedad cubana y el régimen de gobierno, el malestar social y la miseria no han parado de crecer. La raíz de estos movimientos se encuentran en la declinación de las condiciones de vida de las grandes mayorías de trabajadores cubanos. La única respuesta de Díaz Canel es una línea dura de represión contra las protestas. La dirección contrarrevolucionaria al frente del gobierno no puede encontrar una línea “amigable” para la asimilación de la economía cubana al decadente sistema imperialista. A la debacle imperialista se le sumó el desorden generado por la pandemia a nivel mundial y la falta de claridad del imperialismo en su línea hacia Cuba. Y puertas adentro, se acentúan las tendencias al caos capitalista ante la debilidad de la burocracia del Estado para dirigir, lo que es acentuado por la propia debilidad de la estructura económica de la isla. La descomposición imperialista dificulta la asimilación, lo que agrava la descomposición y las tendencias al enfrentamiento entre las fuerzas sociales.
En 2025, se están profundizando las tendencias hacia una guerra generalizada o hacia una nueva guerra mundial, que no será con las características de las dos guerras mundiales anteriores, ya que se daría en una fase de descomposición del imperialismo, y la rapiña sería por definir cómo se integran los ex Estados obreros en proceso de asimilación. En este escenario, Cuba se encuentra vulnerable a ser arrastrada a la conflagración, generando más penurias para la clase obrera cubana.
Es urgente la intervención del proletariado de toda América
Es importante desarrollar la solidaridad internacional con los trabajadores cubanos, contra la represión, por la libertad de los presos políticos y contra el bloqueo yanki, pero los revolucionarios debemos ser categóricos en el planteo de que las fuerzas que se enfrentan en Cuba superan los límites nacionales y se dirimen en la arena mundial. No se trata de desarrollar un programa democrático para llevar las demandas de las masas hacia una solución desde el Estado (nacional) con reformas más o menos “radicales”, se trata de regenerar las bases de la revolución cubana con la extensión de la revolución en la región y la instauración de la dictadura proletaria bajo una dirección revolucionaria.
En un escenario que se acerca cada vez más a la guerra, la clase obrera debe ser consciente de que el enfrentamiento es entre revolución y contrarrevolución. Para colaborar en la tarea de poner en pie una dirección revolucionaria capaz de enfrentar a las direcciones imperialistas y de la burocracia del PC en Cuba, es necesaria la intervención del proletariado de Estados Unidos, América Latina y el Caribe. La lucha por la dictadura del proletariado no puede concretarse en las estrechas fronteras de ningún país americano, sino que adquiere su forma política en la Federación de Repúblicas Socialistas de América.
Para llevar adelante esta tarea, los revolucionarios debemos pelear en el seno de los sindicatos para que la clase obrera salga a la acción con objetivos claros: ¡Abajo el bloqueo imperialista! El desarrollo de la lucha de la clase obrera en Estados Unidos, tanto la clase obrera nativa como la de origen migrante, está indisolublemente ligado a la la pelea contra la orientación guerrerista el imperialismo para tratar de saldar su decadencia histórica, de la que el bloqueo a Cuba y las amenazas militares forman parte. Hay que profundizar el programa internacionalista de nuestra clase en el desarrollo de la organización y las acciones de enfrentamiento a la política de Trump de criminalización, persecución y expulsión de trabajadores migrantes, y el derrotismo de la acción imperialista hacia Cuba. Sobre todo en EEUU debemos imponer la apertura de los intercambios con la isla, con nuestros métodos, la ocupación bajo control obrero de puertos, depósitos y fábricas, la toma del control de las flotas mercantes y la expropiación de las mercancías para enviar a Cuba los hidrocarburos, los alimentos, los medicamentos y vacunas que necesitan los trabajadores y el pueblo pobre. ¡No a la intervención militar imperialista! Ante el menor signo de amenaza de llevar adelante una intervención militar, impongamos la huelga en EEUU y el paro y ocupación de todas las empresas de capitales yanquis en la región. ¡Abajo la represión de la burocracia del PCC, libertad a los presos! Debemos imponer que los sindicatos latinoamericanos y de EEUU se pronuncien por la libertad de los luchadores.
Por eso, desde la TRCI proponemos organizar una Conferencia Internacional de las corrientes que nos reivindicamos por la dictadura del proletariado, para debatir la política, las tácticas y el programa para intervenir en la situación con el objetivo de poner en pie una dirección revolucionaria a nivel mundial, es decir, la reconstrucción de la IV Internacional.
Publicado en TRCI
Los días 20 y 21 de junio se realizó en la ciudad de Buenos Aire el III Congreso de la TRCI, con delegaciones de la LOI Brasil, COR Chile y COR Argentina.
Tendencias de la situación mundial
En este punto ampliamos algunos elementos de las tesis que se presentaron para el Congreso, avanzando en una caracterización de las tendencias hacia la guerra. La agresión desatada por Israel contra Irán, con la intervención de EE. UU., muestra que estamos presenciando tenencias a una guerra generalizada o hacia una nueva guerra mundial. En la campaña electoral Trump había prometido que iba a frenar las guerras en curso, sin embargo, ha acelerado los procesos. Pero esta nueva guerra no será con las características de las dos guerras mundiales anteriores, que fueron para dirimir qué potencia imperialista sería la que dirigiera el mundo. En este caso sería una guerra mundial en una fase de descomposición del imperialismo, cuya máxima expresión se da en EE. UU., y de rapiña por definir cómo se integran los ex Estados obreros en proceso de asimilación. Sería una guerra igualmente reaccionaria, pero no con las características de guerras inter imperialistas de las guerras anteriores, ya que no definimos a los ex Estados obreros como China y Rusia como imperialistas.
Reafirmamos la definición de ruptura del equilibrio inestable, ya que las instituciones creadas en la posguerra no están cumpliendo ningún rol en las guerras abiertas y los procesos de crisis económicas que se están acelerando.
Definimos que estamos en un proceso de recesión de la economía mundial, agravada por la política arancelaria de Trump y que el conflicto entre Irán e Israel podría traer un encarecimiento del precio del petróleo y derivaría en posibles procesos de aumento de la inflación. Esta situación internacional va a abrir situaciones de lucha de clases más agudas, ya que los diferentes gobiernos deberán prepararse para un escenario de guerra y deberán ajustar su economía, lo que provocará enfrentamientos de clase y debemos intervenir en las filas del proletariado con un programa transicional que plantee una salida revolucionaria a la masacre a la que pretenden llevarnos el imperialismo y sus aliados.
Debates sobre China
También discutimos cómo abordar el debate que está atravesando a gran parte del centrismo en el cuanto al análisis de China. Discutimos intentar recuperar el enfoque metodológico que planteaba Trotsky para analizar las economías en transición después de una revolución: la interacción entre la ley del valor y la ley de acumulación socialista, entre sus conflictos y su armonía. En esta interacción se encuentran los aspectos internacional y nacional en los que operan estas leyes, la relación entre la competencia mundial y los sistemas económicos, por un lado, y, en el plano nacional, la conexión entre economía y régimen. Creemos importante retomar este enfoque, ya que nos permite comprender la dinámica de la ley del valor y sus contratendencias en lugar de analizar los fenómenos revolucionarios sólo desde el aspecto de la ley de acumulación o el desarrollo desigual y combinado, sin apreciar los cambios que produjo en las leyes del capital la intervención consciente de una dirección revolucionaria. La perspectiva del centrismo no tiene en cuenta estas interacciones y toma las leyes del capital de forma abstracta. Varias corrientes que se reclaman trotskistas plantean que ya está restaurado definitivamente el capitalismo en China y algunas incluso plantean que es imperialista. Hasta hay corrientes que dicen que China es un capitalismo suigéneris en vías de ser imperialista. Insistimos en que el proceso de asimilación tanto de China como de Rusia aún no está cerrado y esto dependerá de los procesos de la lucha de clases a nivel nacional e internacional y de la dinámica que tome el enfrentamiento entre revolución y contrarrevolución que se nos plantea ante este escenario.
Brasil
El gobierno de Lula está perdiendo apoyo popular y no tiene recambio electoral, por lo que dificulta aún más su gobernabilidad. Por parte de la oposición burguesa, el bolsonarismo estaría en retirada y están viendo quién ocupa su lugar entre alguna figura del centrão o si puede ser el gobernador de São Paulo, Tarcisio Gomes da Freitas. En estos meses se desarrollaron luchas educativas a nivel nacional, que la burocracia traicionó. Nuestra corriente tuvo participación en esta importante lucha contra la burocracia y logramos ganarnos un lugar destacado en la vanguardia.
Ante el escenario mundial debemos buscar una mayor intervención en el movimiento obrero con una línea internacional e impulsar las tareas para parar el genocidio en Gaza. El gobierno de Lula exporta el 40% del petróleo a Israel, por lo tanto, el proletariado tiene una tarea de peso en la lucha contra esa masacre.
Chile
El gobierno de Boric sigue adaptándose a la agenda de la derecha chilena, lo que permite una avanzada más represiva en los conflictos y posiciona a la oposición burguesa con chances de volver al gobierno. A su vez, el Frente Amplio, surgido como respuesta de la burguesía al movimiento de masas del 2019, ha mostrado rápidamente que es un servidor más de los intereses imperialistas y que está dispuesto a atacar a la clase obrera para garantizarlos. Se han dado luchas obreras en los sectores de la pesca, por ejemplo, pero aisladas por las mediaciones reformistas y la burocracia. Es de vital importancia la agitación revolucionaria y redoblar esfuerzos para organizar a la vanguardia obrera que viene desarrollando experiencias atomizadas para que sea el germen de un partido revolucionario que derrote a la burguesía proimperialista, de todos los colores, y a sus agentes en nuestras filas.
Argentina
Milei ha roto con la tradición diplomática del Estado argentino de “neutralidad” ante los enfrentamientos bélicos y se ha alineado fervientemente a EE. UU. y al enclave de Israel, por lo tanto, la lucha por derrotar la política imperialista en la región está indisolublemente ligada a la lucha por la derrota de Milei, apuntando a desarrollar los métodos obreros en el terreno de la producción para afectar sus intereses.
Mientras se desarrollaba el Congreso aún resonaba la noticia de la prisión de Cristina Fernández de Kirchner y el escandaloso posicionamiento de gran parte del centrismo vernáculo en contra de la “proscripción”. Esto ha mostrado un salto en la adaptación de un sector de centrismo trotskista al régimen burgués.
El llamado a la Conferencia Internacional por la Reconstrucción de la IV Internacional
La situación internacional y las perspectivas de un escenario de guerra pone a los revolucionarios ante tareas históricas trascendentales, de ahí la importancia de discutir de cara a las tendencias que reivindican la dictadura del proletariado para avanzar en la reconstrucción de la IV Internacional. Sin embargo, el curso de adaptación de las instituciones de la democracia burguesa y las concepciones oportunistas de muchas corrientes que se reivindican trotskistas a nivel internacional se torna un obstáculo para esta perspectiva. Seguimos insistiendo en la importancia de desarrollar una minoría revolucionaria organizada dentro del movimiento obrero para desarrollar la imprescindible tarea de la lucha programática por la revolución socialista. En este camino no vemos ninguna utilidad en la realización de eventos autoproclamatorios, donde se pretende ocupar el lugar del mandelismo de la última época, que renegó de la dictadura del proletariado, ni rejuntes de grupos sin acuerdos programáticos con nociones vagas como “nueva internacional”. Desde la TRCI reivindicamos que es desde el programa de la IV Internacional, a partir de la sistematización y generalización de la experiencia de la Revolución Rusa que nos dejó Trotsky para seguir desarrollando la lucha por la revolución mundial en la época imperialista.
Resoluciones
El sábado se aprobaron las tesis propuestas y se votaron las resoluciones. Entre ellas:
-Realizar una campaña de agitación y propaganda planteando las tareas que tiene el proletariado para enfrentar al imperialismo y contra la militarización de los Estados, destacando los métodos obreros y alentando la paralización de la producción para afectar los intereses imperialistas. En este sentido, impulsar acciones, charlas, publicando materiales.
-Redoblar la campaña contra el genocidio en Gaza desde una política obrera, planteando que la salida es la lucha revolucionaria por la Federación de Repúblicas Socialistas de Medio Oriente. Impulsar actividades en frente único con quienes compartan esta perspectiva para denunciar los planes del enclave.
-Publicar las tesis en forma de folleto y presentarlas en las regionales de los grupos.
-Publicar un nuevo número de la revista internacional.
Publicado en TRCI-web
El sábado 21 de junio, EE. UU. se involucró de forma directa en la guerra que Israel le había declarado el 13/6 a Irán atacando objetivos militares, sitios de logística de transporte nucleares y de petróleo, además del asesinato de varios lideres militares y políticos. Con la operación llamada “martillo de medianoche”, EE. UU. bombardeó instalaciones nucleares de Fordow, Natanz e Isfahan. Dos días más tarde, al cierre de esta nota, la administración Trump anunció un supuesto alto al fuego, que por el momento no ha sido confirmado ni por Israel ni por Irán.
El parlamento iraní recomendó cerrar el estrecho de Ormuz, decisión que toma en última instancia el líder supremo del régimen, el Ayatollah Alí Khamenei. Por ese estrecho pasa el 20% del consumo diario mundial de petróleo, lugar clave para el comercio internacional, sobre todo para Europa, Estados Unidos y también para China. Por lo que, si el conflicto se extiende en el tiempo, las consecuencias económicas a nivel mundial van a ser muy importantes, ya que habrá un aumento del precio del petróleo, eso encarecerá los fletes de mercancías, lo que llevará a un aumento en los precios generales que aumentará la presión inflacionaria en medio de una recesión mundial.
Algunos funcionarios del régimen iraní se reunirán con Putin para buscar reforzar alianzas. Irán sigue atacando con misiles a Israel, lo que está provocando una aceleración de una crisis política al interior del enclave y dudas sobre dónde los está llevando la política de Netanyahu.
Al intervenir, EE. UU. intenta salvar a su socio de Israel y reconfigurar Medio Oriente, en medio de una situación de descomposición del imperialismo norteamericano y de desesperación del enclave imperialista de Israel, que está viendo cómo se resquebraja su poderío en la región. En esta situación mundial estos ataques militares expresan que el imperialismo ya no puede dominar con las instituciones creadas en la posguerra y debe apelar al poderío militar para conseguir triunfos tácticos, pero que abren escenarios de mayor convulsión mundial. Inclusive algunos asesores de Trump le recomendaron no involucrarse, ya que tienen una amenaza mayor en el interior de su país con los conflictos abiertos por la política anti inmigratoria.
Asistimos a una tendencia de guerra generalizada, en la que el imperialismo norteamericano en decadencia pretende mantener su hegemonía mundial sin haber logrado cerrar el desarrollo de una crisis mundial abierta desde 2008. A esto se suman los procesos de asimilación de los ex Estados obreros al sistema capitalista que, como muestra la situación, cada vez se tornan más catastróficos. La ruptura del equilibrio inestable abre un sinfín de procesos políticos y sociales que el imperialismo intenta saldar con preparativos guerreristas y ataque a las masas y a los que nosotros debemos responder con la preparación de procesos revolucionarios, para frenar las tendencias belicistas y dar una salida obrera y socialista derrotando al imperialismo y sus agentes nacionales. Debemos desarrollar una lucha internacional para involucrar a gran parte del proletariado al debate de los problemas internacionales y las tareas que de ellos se desprenden.
Estamos por el triunfo militar de Irán contra el imperialismo y el enclave de Israel, pero no defendemos el régimen iraní; apelamos a la organización independiente del proletariado, que es la única clase que está interesada en derrotar a sus verdugos. Es una tarea central recuperar las consignas antiimperialistas y enfrentar a los regímenes bonapartistas sui generis de Oriente Medio; estas burguesías títeres del imperialismo son traidoras a la causa palestina. Son traidoras a toda idea de liberación nacional, incluso de sus propios países, llevando con sus experimentos de corte nacionalista burgués, ya sean nacionalistas o islámicos, a la total postración al imperialismo, a la represión violenta de los trabajadores y el pueblo pobre y a la descomposición territorial de los semi Estados artificiales creados en la posguerra como vemos hoy en Libia, Siria, Líbano o Irak.
El proletariado de Medio Oriente y del Magreb debe enfrentar a sus gobiernos y expulsar al imperialismo de la región y destruir el enclave de Israel y así frenar el genocidio en Gaza, formando una Federación de Repúblicas Socialistas de Medio Oriente y el Magreb como forma estatal de la dictadura del proletariado internacional. El proletariado de los países imperialistas debe derrotar a sus gobiernos y frenar la guerra. El proletariado ruso y ucraniano debe luchar en conjunto para derrotar el proceso de asimilación de los ex Estados obreros y transformar esa guerra en una guerra de autodefensa revolucionaria. El proletariado chino debe entrar en escena contra el proceso de asimilación y unirse a las luchas obreras de todo el mundo. En definitiva, debemos buscar la intervención de los batallones obreros en todos los países, de forma independiente, para que, con los métodos y la organización de la clase, logremos parar la masacre de una nueva guerra mundial, a la que nos quieren llevar.
Ante la magnitud de la crisis, la aceleración de los preparativos guerreristas y las consecuencias que esto tendrá para nuestra clase se torna urgente el llamado a una Conferencia Internacional con las corrientes que aún levantan la dictadura del proletariado. Hacemos este llamado desde la necesidad de avanzar en abrir un debate al interior de las corrientes trotskistas, para reagrupar a la vanguardia detrás de un programa revolucionario y poder intervenir en la situación internacional como dirección revolucionaria que aspira a que emerja una nueva generación que retome las tareas históricas de construir el partido mundial de la revolución que en esta época es la reconstrucción de la IV Internacional.