En esta situación donde el conjunto de la clase trabajadora está siendo blanco de un ataque furibundo por parte del gobierno de Milei, que empleando DNUs, proyectos de ley y las fuerzas represivas del estado, embiste contra a nuestras condiciones salariales, laborales y organizativas, el escenario para los trabajadores estatales en las provincias se vuelve cada vez más complicado.
A lo largo y ancho del país los distintos gobiernos provinciales, ya sean parte de Juntos x el Cambio, Unión x la Patria u otras coaliciones autóctonas, se suman a ese ataque que no tiene otro fin que el de alinearse con el FMI y los sectores patronales más concentrados para garantizar el pago de los intereses de la deuda externa, achicando el déficit presupuestario, para lo cual, siempre la variable de ajuste, son nuestras condiciones de vida.
En San Luis particularmente, no debemos de olvidar que Rodriguez Saá, durante sus años de mandato cumplió un rol patronal muy importante. Logró disgregar sindicalmente a los trabajadores estatales, aumentó de muchas maneras la precarización laboral, eliminó las paritarias y cuando sectores, como los docentes, masivamente se pusieron en pie de lucha en el 2004 y 2010, los mando a reprimir y quebró las luchas por hambre con los descuentos salariales.
El Gobierno de Poggi (otrora funcionario de los gobiernos Saaístas y aprendiz de ellos) es continuidad en el ataque hacia los trabajadores.
Por ello ha decretado el pago de los salarios estatales en dos veces, asi como tambien el congelamiento salarial por todo el 2024.
Nos venía ajustando Rodriguez Saá, Poggi viene a profundizar y acelerar el ajuste, pero es momento de decir ¡basta!
El rol de las Conducciones Sindicales
En San Luis la dispersión sindical es muy grande.
Si bien esto se da en la mayoría de los sectores estatales, el ejemplo más claro se da en Docentes.
Hay 5 sindicatos distintos: Uda, Amet, Asde, Utep y Sadop (privados) con muy pocos afiliados cada uno y una gran cantidad de docentes sin afiliación a ningún sindicato.
Esta situación se debe a las derrotas ocurridas en los conflictos del 2004 y 2010 y la entrega de esas luchas por la mayoría de las conducciones sindicales.
Todos estos años evitaron confrontar con el gobierno, antes los distintos ataques de Rodriguez Saá. Muchos fueron sus aliados y militaron sus campañas políticas, por todo ello existe una gran desmovilización y desconfianza a la hora de afiliarse.
En el resto de los sectores estatales provinciales (Salud, Judiciales, Administración Publica, etc), aunque con diferencias de matices, la realidad es parecida.
Si bien, producto de la bronca y de forma muy espontánea, se está comenzando a gestar un movimiento de trabajadores autoconvocados (docentes y trabajadores de salud) que ha desafiado los intentos de algunas conducciones sindicales de permanecer en la inacción, esto tiene que servir como impulso para reorganizarse dentro de los sindicatos.
Es una tarea del activismo independiente y la izquierda afiliar a los desafiliados, presionando a las direcciones para salir a la lucha y paralelamente organizar oposiciones sindicales revolucionarias que se planteen recuperar los sindicatos para ponerlos al servicio de nuestros intereses.
El paro Nacional del 24 de Enero
Las Centrales Sindicales (CGT y Ctas) más allá de declaraciones públicas en contra de los planes Gubernamentales, en los hechos están garantizando la gobernabilidad a Milei y sus secuaces.
Lejos de tratar de organizar asambleas en los lugares de trabajo para votar un plan de lucha a la altura del ataque que venimos sufriendo, quieren llevarnos a confiar en instituciones que no son las nuestras: en la Justicia Burguesa y también en la cueva de ladrones que es el Congreso Nacional, para de esta manera negociar sus privilegios que se ven afectados con los decretos y leyes.
Han llamado tardíamente a un paro Nacional para el 24 de enero desde el mediodía con la sola perspectiva de demostrar un numero importante de trabajadores en la calle.
Debemos de aprovechar esa oportunidad y preparar con asambleas y plenarios de delegados de base que el paro sea contundente en los lugares de trabajo y confluir en una gran movilización provincial el 24 de Enero.
Ademas del repudio a las legislaciones que nos quiere imponer Milei y los gobernadores, debemos comenzar a deliberar un plan de lucha a corto mediano y largo plazo para enfrentar la crisis que nos están haciendo a pagar a los trabajadores estatales, ya que nos vienen ajustando desde hace mucho tiempo.
Abajo el ajuste a los trabajadores!
Fuera el FMI!
Abajo el DNU y la Ley Omnibus de Milei!
Abajo el desdoblamiento y el congelamiento salarial de Poggi!
Aumento salarial, salario inicial = canasta familiar, con ajuste mensual a la inflación !
Pase a planta permanente de los compañeros estatales contratados y/o monotributistas!
Plenarios de delegados con mandato de asamblea para imponer nuestras demandas!
Estatales de la COR
Regional San Luis