Mientras que a nivel nacional el Gobierno de Milei trata de redoblar la apuesta intentando llegar a un pacto social con los Gobernadores para seguir implementando un brutal ajuste sobre la clase trabajadora, a nivel provincial el Gobierno de Poggi no se queda atrás.
El plan de Poggi argumentando la crisis económica es mantener y profundizar la avanzada del Gobierno de Rodríguez Saá en cuanto a precarización laboral.
Un poco de historia
El ex Gobernador Saá comenzó a partir del 2003 un proceso de reformas a nivel provincial que atacaban a los trabajadores del sector publico en su conjunto y reforzó la intervención en los conflictos que se producían en el sector privado siempre a favor de las patronales.
En los procesos de conflictos mas álgidos del sector privado e Industrial no dudó en poner las instituciones estatales (programa de Relaciones laborales, Justicia y la polícia) siempre a favor de las cámaras patronales como en Bagley (1987), Tersuave (2004 y 2010), Sinjintex y Fibracentro (2007), llegando a una represión salvaje en Pagoda (fines del 2007).
Otras duras represiones fueron a los docentes en 2004 y Municipales de Villa Mercedes en 2005.
En el sector público creo el Plan de Inclusión Social ante el problema de la desocupación para tener disponible mano de obra barata y para crear una base política para este proyecto reaccionario.
Así muchas de las nuevas incorporaciones al sector público fueron a partir del plan teniendo a trabajadores que debieron soportar años y años antes de poder pasar a planta permanente y con sueldos miserables. Además de obligarlos a estar presentes “apoyando” todos sus actos de gobierno.
Al mismo tiempo reformó el sistema educativo y de salud a su gusto y placer con el objeto de disgregar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores. Una parte muy grande de los salarios se encuentra como “No Remunerativo” los que lleva las jubilaciones a la baja.
El sistema educativo es quizás donde mas avanzó creando las escuelas Charters, autogestionadas, digitales y generativas. Podemos decir que es la vanguardia del proceso a nivel nacional en cuanto a la precarización laboral docente y la semi -privatización educativa.
Aceleró en su plan a partir de que enfrentó y triunfo sobre los conflictos docentes del 2004, durante el cual no dudó en utilizar la represión policial e institucional contra los manifestantes, y en el 2010 cuando quebró la huelga por hambre con un festival de descuentos salariales.
Las conducciones sindicales del sector docente en su conjunto, por acción u omisión fueron cómplices de estas políticas. Si bien en 2004 y 2010 por presión de las bases se pusieron a la cabeza de las movilizaciones luego de las derrotas, producto de sus políticas vacilantes, en lineas generales no pasaron de sacar comunicados de prensa o alguna reunión para quejarse de alguna cuestión parcial.
A partir del acercamiento de CFK durante el gobierno de Macri al parecer transformó por conveniencia política, para muchos de los dirigentes gremiales a Rodriguez Saá de un represor de los trabajadores a ser un líder “Nac & Pop”.
Los salarios del Sector estatal en San Luis fueron históricamente bajos, a partir del paso de Poggi a la oposición y de entrar en elecciones cada vez con menos margen en cuanto a votos Rodriguez Saá comenzó un proceso de recomposición salarial de bolsillo en los sectores estatales inclusive con el Plan de Inclusión social, algo que evidentemente no le alcanzó para mantenerse en el poder.
Poggi, el mejor alumno de Rodriguez Saá
Por mas que se esfuercen en querer mostrar que son tan opositores políticos en los hechos queda claro que el objetivo de hacer pagar la crisis económica a los trabajadores los unifica. Tantos años siendo Poggi empleado de los hermanos Saá no han sido en vano
Desde su asunción Poggi denuncia que el anterior gobierno desfinanció las arcas públicas antes de retirarse, de ser así, no podría sorprendernos esto, pero esta claro que la intención con los trabajadores es la misma.
Hace algunos días el gobernador cometió la canallada de culpar a los trabajadores y al Sindicato Aceitero por el Cierre de la fabrica Dánica, diciendo que “por reclamar cosas alocadas se perdieron mas de cien fuentes de trabajo en San Luis”. Se preocupo porque “las autoridades de la Justicia no actuaron a tiempo”, dejando en claro que de haber conflictos en la Industria intervendrá “para defender las fuentes laborales”. Dejando en claro que será a favor de las patronales.
Poggi ya cuenta en su haber con la represión policial a los trabajadores de Tubhier en el 2015, en su anterior mandato cuando formaba parte del PJ Provincial
Los compañeros de Dánica salieron a la lucha por lo que les correspondía en cuanto a salario, ya que cobraban la mitad de lo que establecía el convenio colectivo aceitero. Lucharon con asambleas, huelgas y piquetes contra una patronal como el grupo Beltrán que tenia subsidiado con fondos públicos del Gobiernos Nacional su funcionamiento y aun así pagaba salarios de miseria.
Quienes fuimos parte del apoyo incondicional que tuvieron los compañeros en su lucha sabemos que fueron perseguidos por la patronal y ninguneados por la mayor parte de la burocracia sindical.
El Sindicato y la Federación Aceitera se mostraron carentes de iniciativa política para que los compañeros triunfen en la lucha.
El primer decreto de Gobierno de Poggi (150/23 PE SL) establece el desdoblamiento salarial y el congelamiento salarial al menos por el 2024. Una vez mas la variable de ajuste son los trabajadores, los compromisos contractuales con las patronales son intocables, el salario de los trabajadores no.
Desde ya que la precarización laboral fomentada por el Gobierno anterior es intocable y fundamental, viendo como cada día se profundiza mas.
El Gobierno cuenta a su favor con una gran dispersión sindical que se arrastra en el sector estatal desde hace mucho tiempo, con un gran porcentaje de trabajadores desafiliados lo que hace muy complicado unificar un plan de lucha contra el ajuste.
Un sector importante de los estatales todavía cree que la crisis y el ajuste son circunstanciales, además de haber miedo a represalias y una gran desconfianza con las conducciones sindicales.
Es natural que esto suceda, debido a que la mayoría estas conducciones no pudieron o no quisieron poner ni las manos durante el Gobierno de R.Saá y al día de hoy tampoco están haciendo nada sustancial para organizar el descontento del sector mas predispuesto a la lucha.
Organización para la acción
Desde antes del cambio de gobierno se viene organizando un sector de trabajadores autoconvocados ante la inacción de la burocracia sindical. Es un soplo de aire fresco ya que muestra predisposición a la lucha de una nueva generación que se incorpora al sector estatal y comienza a hacer sus primeras experiencias de organización.
Esta nueva generación de luchadores tiene la tarea de organizarse dentro de los sindicatos formando oposiciones sindicales revolucionarias para empujar a las conducciones a salir a la lucha, disputando la conducción del gremio y transformarlos en herramientas que respondan a los intereses de los trabajadores.
Para comenzar a enfrentar el ajuste el camino correcto es organizar tanto en los sectores estatales, de la industria y los servicios, la verdadera democracia de los trabajadores, con asambleas por lugar de trabajo que voten delegados de base que confluyan en un plenario de Delegados de Base que vote un plan de lucha para comenzar a poner freno a la ofensiva patronal y poner de pie a la clase trabajadora.
COR Regional San Luis