COR logo

Los trabajadores municipales de Mendoza tienen que ganar

Lunes, 06 Julio 2020 23:12

Los trabajadores municipales de la ciudad de Mendoza, organizados en ATE, llevan ya un mes de conflicto en reclamo de recomposición salarial. Perciben salarios que rondan los 10 mil pesos, gran parte compuesto por adicionales no remunerativos ni bonificables. En este tiempo, el tándem radical Suárez-Suárez que gobierna el municipio y la provincia, los ha reprimido tres veces, con desalojos, gaseos, golpes, denuncias penales individuales y al sindicato, y sumarios.

La última represión, ocurrió este domingo 5/7, tras 12hs de intimidación policial y amenazas de la fiscalía, que concluyeron en el violento desalojo de la protesta que sostenían en el KM 0 de la ciudad, y la detención y agresión física de 46 trabajadores, entre ellos los dirigentes de ATE, Adriana Iranzo y Roberto Macho, y de SUTE, Sebastián Henríquez y Pablo Massutti. El argumento para el accionar policial, y la imputación posterior de 36 del total de detenidos, fue la violación del artículo 205 del código penal que castiga con prisión a quien no acate las medidas dispuestas por las autoridades para la prevención de una epidemia. Lo cínico de tal argumento, es que en Mendoza está permitido compartir una mesa de bar con 10 amigos, pero te mandan la infantería si 4 laburantes, que se cagan de hambre con sueldos miserables, se encadenan a un banco en la peatonal. Otra muestra más del carácter antiobrero del conjunto de medidas dispuestas por el decreto de Alberto en acuerdo con los gobernadores, para disciplinar a la población trabajadora que están cargando con lo peor de la crisis económica y sanitaria.  

El sector de limpieza urbana y de preventores que está en lucha por recomposición salarial, se está organizando en ATE, mientras el sindicato mayoritario es el SOEM, dirigido por el concejal radical Dugas Chapel, abiertamente alineado con la gestión Suárez. No es un dato menor que después de la primera represión a los municipales en lucha (desalojados por la policía el 13/6 cuando realizaban un acampe en el predio usado por la municipalidad en el Barrio La Favorita), el SOEM, para descomprimir, negoció el 16/6 que parte del salario pagado con tickets alimentarios, pasara a pagarse a partir de julio como dinero en efectivo, totalmente en negro. Acuerdo inconsulto con la base, mucho menos con el sector en lucha, y claramente insuficiente. Este es el rol de una burocracia podrida que no ha repudiado la represión sufrida por este sector de trabajadores municipales, y es la principal garantía de subordinación de los empleados municipales a las políticas de precarización, tercerización y pauperización de la gestión radical en la ciudad.

Este conflicto se volvió testigo de la problemática que padecemos el conjunto de los estatales. El radical Suárez en Mendoza, igual que Alberto en la nación, priorizan el pago de la deuda externa y la negociación con los bonistas, a costa de salarios congelados, despidos y suspensiones. Aguinaldos postergados. Paritarias cerradas. Alta precarización laboral, con contratos basura, prestaciones, suplencias, monotributo, etc. Y también porque la fragmentación sindical agrava la crisis de dirección del conjunto de los estatales. Los reclamos son los mismos: reapertura inmediata de paritarias, recomposición salarial, pase a planta permanente. Pero el alineamiento de conducciones con el gobierno del Frente de Todos por un lado, y de Cambia Mendoza por otro, se traduce en desmovilización y desconfianza de las bases.

Los municipales en lucha, que soportaron tres represiones y no han sido doblegados, tienen que triunfar. Son hoy una referencia para el conjunto de los estatales, y tienen ganada la autoridad para convocar a provincializar el conflicto, instando a poner en pie un congreso de delegados estatales de base mandatados, que supere la fragmentación de las conducciones y permita centralizar las fuerzas dispersas de los trabajadores. Esta instancia es clave para debatir y resolver un plan de lucha unificado, que prepare un paro provincial hasta imponer el reconocimiento de las demandas de los municipales, y que obligue a Suárez a sentarse a discutir en una paritaria estatal única.

Un congreso de delegados de base, es necesario, para avanzar en un debate programático de cara a resolver la grave crisis de dirección que nos atraviesa al conjunto de los estatales. Las tendencias y delegados antiburocráticos y de izquierda, tenemos la responsabilidad de batallar por un programa de independencia de clase, forjando una oposición sindical revolucionaria que dispute la dirección de la lucha de los estatales y prepare la recuperación de los sindicatos. En cada lugar de trabajo, impulsemos asambleas y mandatos de PARO PROVINCIAL y de ruptura de la tregua de las CGT y CTAs al gobierno del FdT. Preparemos un congreso que discuta cómo enfrentamos la crisis económica y sanitaria con nuestros métodos de clase.

 

Los estatales, la policía y el monopolio de la fuerza del Estado.

En el conflicto de los municipales, junto al sector de limpieza urbana, sostienen la lucha un grupo de preventores. Los preventores son un cuerpo de civiles, creado en el ámbito de la Municipalidad de Mendoza, por decreto del año 2008 (luego emulado por otros municipios), con el objetivo de observar, informar y colaborar con la Policía de Mendoza. Como cuerpo de civiles, auxiliares de la Policía provincial, portan tonfas y gas pimienta, y tienen acceso al sistema Tetra de comunicación encriptado que usa la policía. Si bien son civiles, son casi 300 los preventores de la ciudad, cuya función es la cooperación y coordinación como auxiliares en el accionar policial.

No podemos ser indiferentes a las implicancias de esta relación. Más aún en esta situación de crisis económica mundial acelerada por la pandemia, frente a la cual, la cuarentena es utilizada por Alberto y los gobernadores, para aumentar el control de la circulación de bienes y de trabajadores. Para ello son las medidas de mayor intervención de las fuerzas de seguridad, incluyendo el despliegue del ejército en las barriadas, como parte de la preparación de los capitalistas y su Estado para enfrentar las respuestas de nuestra clase ante las consecuencias de la crisis general del capitalismo. Medida que ya se ha cobrado numerosas vidas, como Luis Espinoza en Tucumán, dos jóvenes muertos en las comisarías de San Luis, Facundo Scalzo y tantos otros asesinados por gatillo fácil en el marco del ASPO. Esta tendencia es internacional, y vemos su expresión, con sus especificidades, en las movilizaciones contra los asesinatos raciales a manos de la policía en EEUU, y la discusión abierta en el movimiento obrero sindicalizado respecto a la expulsión de los sindicatos de policía de las centrales obreras.

La policía es una fuerza integrada por individuos que se forman y trazan su vida como miembros de las instituciones represivas del Estado burgués. Los policías, oficiales, suboficiales, espías de la exSIDE y demás servicios, no son obreros aunque ganen poco, soporten largas horas de servicio, los maltraten los superiores o vivan en malas condiciones. Es una aberración completa considerar que existe algún tipo de “unidad de clase” con los policías, a pesar de poder ellos mismos ser hijos de obreros u obreras, y de percibir por su servicio una remuneración salarial. Su función es opuesta a los asalariados que trabajan en la producción o en servicios. La función del policía consiste esencialmente en colaborar con la explotación capitalista, asegurando en forma “técnica y administrativa” la extracción de plusvalía y la disciplina laboral. Aunque sean pobres o maltratados no significa ni mucho menos que los policías sean explotados. Los trabajadores son explotados porque rinden plusvalía al patrón. El policía amordaza al obrero y ayuda al patrón a tenerlo esclavizado. “El hecho de que los agentes de policía fueran reclutados en gran parte entre los obreros socialdemócratas no significa absolutamente nada. Aquí también la existencia determina la consciencia. El obrero que se hace policía al servicio del Estado burgués es un policía burgués y no obrero. (…) Pero lo más importante es que todo policía sabe que los gobiernos cambian, pero la policía queda” (León Trotsky. Alemania, la revolución y el fascismo).

En este conflicto, un grupo numeroso de preventores estuvo en la lucha, junto a los trabajadores de limpieza urbana, soportando incluso la represión de la fuerza policial. Es importante dar el debate de la perspectiva que abre este conflicto para el sector. Por ello sostenemos que los preventores que están en la lucha junto al resto de los municipales, deben plantear la disolución del cuerpo de preventores, y su reubicación en otras tareas y servicios municipales.  Porque cualquier lucha reivindicativa elemental, nos encontrará una vez más, enfrentando el accionar policial como fuerza represiva del Estado para disciplinar a los trabajadores. Debilitar el poder represivo estatal, es central en la perspectiva estratégica de la destrucción de este Estado, que no es nuestro Estado.

Artículos Relacionados en Represión paritarias ajuste Estatales Mendoza

  • El gobierno congela los salarios metalúrgicos

    El gobierno de estafadores libertarios comenzó el año elevando la presión para mantener los salarios obrero por debajo de la inflación. Ni hablar de la recuperación de lo perdido desde diciembre de 2023. Su discurso anti Estado es otra de sus estafas: a través de la secretaría de trabajo, aplica todo el peso de la legislación laboral para negar la homologación de todo acuerdo de rama que no sea del gusto de Caputo y Milei. Todo en beneficio de las patronales, que así no están obligadas a pagar incluso los míseros acuerdos que negocia con las conducciones sindicales.
    El caso más resonante es el de los metalúrgicos. El secretariado nacional, con Abel “Chamullo” Furlán a la cabeza, bajó tres veces las pretensiones para cerrar el acuerdo salarial pendiente desde noviembre de 2024. Sin embargo, aún cuando luego de esas agachadas las cámaras patronales firmaron el acuerdo paritario, a la fecha la secretaría de trabajo alega “cuestiones de forma” para no habilitar la homologación. Así, los metalúrgicos no recibimos aumento nominal de nuestros magros sueldos desde octubre del año pasado. Esto significa que el salario en términos reales, es decir, medidos por su poder adquisitivos, se reducen mes a mes al ritmo de la inflación. Y hace rato están en la lona.
    La burocracia sindical patalea y saca comunicados. Lo mismo que hace con la denuncia de las decenas de miles de despidos y suspensiones en la rama producto de la crisis económica a que lleva la política recesiva del gobierno nacional, bancado por los gobernadores y la casta del congreso. Y nada más que eso, ni una medida de fuerza para imponer a las patronales el aumento que necesitamos los metalúrgicos, sobre todo los de la rama 17 que no llegamos a la mitad de la canasta de consumos mínimos mensuales calculada por ATE INDEC en $1.600.000 al mes de enero.
    En la seccional Córdoba, Urbano no se sale del libreto: los reclamos y quejas abundan pero a la hora de pelear contra los despidos en las diferentes empresas, no saca ninguna medida conjunta y deja a los compañeros y delegados peleando fábrica por fábrica, ¡como si la crisis no fuera generalizada para toda la rama! Ni hablar de salir a pelear por el aumento igual a la canasta básica, como se ha planteado en los congresos seccionales; ni siquiera hay voluntad de imponer el pago de lo ya firmado a las empresas.

    Independencia de los sindicatos del Estado

    Cuestionar la intervención del Estado en las relaciones laborales va en contra de la ideología y de los propios intereses de la burocracia sindical peronista. Por eso, no pueden enfrentar el techo salarial impuesto por Milei y su gobierno a través de la no homologación de acuerdos, ni la imposición de conciliaciones obligatorias para bloquear las medidas de fuerza de los trabajadores. El Estado juega para las patronales, la burocracia sindical que dirige los gremios es la tercera pata de esa Santa Alianza.

    Congreso de delegados con mandato y Paro nacional metalúrgico

    La situación no da para más. No podemos permitir más despidos, ni acuerdos de rebajas salariales y suspensiones para que la crisis la paguemos los metalúrgicos, ni seguir viviendo con un salario de miseria. Es hora de enfrentar la injerencia del estado en la paritaria y sacarnos de encima a los burócratas como Furlán que no mueven un dedo para mejorar nuestra situación.
    Impulsemos asambleas en las fábricas, mocionemos la necesidad un congreso de delegados metalúrgicos con mandato de base para votar un plan de lucha por la reincorporación de todos los despedidos, basta de despidos y suspenciones, efectivización de los contratados y trabajadores de consultoras, pago inmediato de todos los montos acordados, pase al básico de los premios (presentismo, productividad, incidencias, etc). Para enfrentar los planes de crisis de las empresas, impongamos las escalas móviles de horas de trabajo y salario, con un salario inicial mínimo igual a la canasta básica. Si las empresas lloran que están en crisis, impongamos la apertura de los libros contables.  
    En cada seccional, cómo es el caso de Córdoba, podemos iniciar la lucha impulsando congresos regionales de delegados con mandato para romper la pasividad de los burócratas cómo Urbano, que se escudan en la inoperancia de Furlán y el secretariado nacional y esperan que los problemas se resuelvan por la buena voluntad de un gobierno nacional que odia a la clase obrera y no da pisada sin pedir permiso a EEUU y el FMI.
    Recuperemos la UOM y la CGT. Impongamos la voluntad de las fábricas para acabar con este desastre. Vamos al paro nacional metalúrgico y a un plan de lucha por el salario y contra los despidos.

  • A 50 años del inicio del Operativo Independencia

    El 5 de febrero de 1975, María Isabel Martínez de Perón, en ejercicio de la presidencia tras la muerte de Juan Domingo Perón, firmó el decreto del Poder Ejecutivo Nacional N° 261 que dispuso en su artículo 1°: “El Comando General del Ejército procederá a ejecutar las operaciones militares que sean necesarias a efectos de neutralizar y/o aniquilar el accionar de elementos subversivos que actúan en la provincia de Tucumán”. El resto del articulado del decreto disponía la concentración del personal y medios policiales provinciales bajo control operacional del Comando General del Ejército. Así también establecía tareas de “acción cívica” (art. 5°) y “acción psicológica” (art´. 6°).

    Esta orden represiva del gobierno constitucional peronista, se complementó con otros decretos secretos que dieron forma al despliegue territorial y al plan operacional que será un gran ensayo reaccionario del terrorismo de Estado que se generalizará tras el golpe un año después. La tortura de detenidos ya era una práctica del aparato represivo del Estado desde décadas atrás, así como el propio Perón había dado rienda suelta al accionar de grupos de tareas parapoliciales como la Triple A para perseguir y asesinar a la izquierda peronista y a la militancia obrera y de izquierda. Pero el Operativo Independencia fue un ensayo a gran escala del plan genocida cívico-militar:

    • El Operativo institucionalizó la desaparición forzada de personas en un sistema de centros clandestinos de detención como metodología de terrorismo de Estado. Unas 825 personas fueron detenidas y torturadas en al menos 80 centros clandestinos, de las cuales 258 personas continúan desaparecidas,
    • contó con la participación activa de las grandes empresas y familias poderosas de Tucumán, directas beneficiarias del accionar represivo. La responsabilidad empresaria se materializó en la sesión de tierras para la relocalización y control de población obrera rural, el aporte de grandes sumas de dinero para financiar el accionar represivo, la sesión de vehículos e inmuebles para ser utilizados en el secuestro, detención, tortura, asesinato y desaparición de delegados sindicales y activistas obreros de sus fábricas e ingenios,
    • complicidad judicial con la represión clandestina e ilegal,
    • colaboración y justificación del accionar represivo de parte de todos los partidos patronales (UCR, PJ), de la burocracia sindical peronista y la Iglesia.

    La vanguardia de la resistencia obrera como objetivo del accionar del Operativo

    La resistencia obrera a la dictadura de Onganía y a los planes patronales de imponer una nueva relación de fuerzas en la producción, moldeó una nueva generación de trabajadores. Un activismo de base hizo su experiencia con la burocracia peronista que colaboraba abiertamente con el gobierno militar y se acomodaba a la idea de un peronismo sin Perón (en el exilio). Se templó en la militancia obrera clandestina en las fábricas de los cordones industriales, organizando sabotajes al aumento e intensificación de los ritmos de trabajo que imponían las patronales, y preparando la recuperación de los sindicatos contra la burocracia traidora.

    Este proceso será expresión en nuestro país de la tendencia internacional al ascenso de la lucha de clases, en la que amplios sectores de la clase obrera y la juventud mostraron enorme politización y combatividad. Los obreros del azúcar en el NOA serán parte de esta tendencia. En Tucumán, tuvo centralidad la lucha de los ocupados y desocupados del azúcar contra el cierre de ingenios y los despidos masivos que impuso Onganía en base a una brutal represión. En enero de 1967 la policía tucumana asesina a Hilda Guerrero de Molina, esposa de un desocupado del Ingenio Santa Lucía, durante la violenta represión de una manifestación de obreros del azúcar. El despliegue represivo no contendrá la disposición a la lucha que seguirá en ascenso con hitos como el Tucumanazo (noviembre de 1970), el Quintazo (junio de 1972), la huelga de los obreros de Ledesma en 1972 (la primera huelga en 21 años) en Jujuy, y la huelga general de la FOTIA en 1974. Este proceso excedía en gran medida la influencia de las organizaciones que desarrollaron las estrategias de guerrilla urbana o foco rural. El Operativo Independencia se propuso no sólo el aniquilamiento del ERP en el monte, sino a toda la resistencia obrera y popular que se forjó durante la resistencia obrera previa.

    La ausencia de un partido revolucionario

    Existían numerosas organizaciones de izquierda, de diversas tendencias, con presencia y militancia en las fábricas. A causa de la influencia de la revolución cubana y los movimientos de liberación nacional, sectores de la juventud radicalizada habían escogido el camino de la lucha armada, entre los cuales el PRT-ERP apostó al desarrollo de una estrategia foquista en el sudoeste tucumano. Sin embargo, la influencia ideológica de una tendencia burguesa como el peronismo, imprimía un sello conservador aún en los sectores más radicalizados del movimiento obrero, impidiendo por accionar de la burocracia sindical el camino hacia la dictadura proletariado.

    La lucha de clases se desarrollaba a nivel mundial de forma acelerada, pero operaban los diques de contención apuntalados por la burguesía nacionalista: la ideología estatista, la ilusión reformista y la acción contrarrevolucionaria de burocracia sindical. En igual sentido actuaba la burocracia estalinista que maniobraba en los países semicoloniales en función de su disputa con la burguesía imperialista. El castrismo, alineado a Moscú, practicó la lucha armada, pero pronto el foquismo se reveló impotente en la mayoría de los países, centralmente urbanos y de composición obrera. El trotskismo del SU claudicaba ante el castrismo, sustituyendo a clase obrera por la guerrilla como sujeto de la revolución, y el morenismo practicaba una política conciliatoria al adaptarse al peronismo.

    Aunque la disposición a la lucha era amplia entre los obreros y la juventud, la ausencia de una dirección revolucionaria, el control burocrático de los sindicatos y la dispersión de los grupos trotskistas impidieron el surgimiento de un partido capaz de unir a la vanguardia obrera organizada en las comisiones internas y cuerpos de delegados, recuperar los sindicatos y establecer una alianza con la población oprimida en torno de un programa que sostuviera los principios del internacionalismo proletario y la dictadura proletaria. Una vez más, la crisis histórica de la dirección revolucionaria.

    Tras el ensayo en Tucumán, el golpe.

    Aunque el gobierno peronista había logrado derrotar a la guerrilla con el Operativo Independencia y asestado un golpe al movimiento obrero con el “Pacto social” y el plan económico de Celestino Rodrigo, las masas obreras seguían con notable vitalidad luchando por sus reivindicaciones y radicalizando sus métodos con ocupaciones, piquetes y secuestros de patrones.

    El último recurso que quedaba a la burguesía era el Ejército, cuyos cuadros dirigentes habían sido preparados por el imperialismo yanqui para la “guerra contra el enemigo interno” testeada en Tucumán. El golpe en 1976 estableció una feroz dictadura que generalizó en todo el país el plan sistemático ensayado y perfeccionado en Tucumán. El terrorismo de Estado liquidó lo mejor de una generación que avanzaba hacia una clara ruptura con el capitalismo. El golpe fue parte de un plan reaccionario continental que abarcó a los principales países de Latinoamérica y estableció la doctrina de seguridad nacional como forma de dominar a las masas que cuestionaban de forma abierta la opresión imperialista y el orden burgués. En su carácter de gendarme mundial del capitalismo, EE.UU alineó a los estados semicoloniales bajo su égida para someter a sangre y fuego el avance de los movimientos revolucionarios.

    Contra las provocaciones del negacionismo

    Repudiamos las provocaciones montadas por la “familia militar” de los condenados por delitos de lesa humanidad y los nostálgicos de la dictadura, que organizan en Tucumán actos reivindicativos del accionar del Ejército a 50 años del Operativo Independencia. Forma parte de las provocaciones que monta el negacionismo, buscando el auspicio del gobierno de LLA, de la alicaída Villarruel y del peronismo provincial para lograr impunidad y legitimidad para el accionar represivo de ayer y de hoy.

    Los ataques verbales y las políticas de Milei y sus acólitos, tuvieron un repudio masivo en las calles el pasado 1ro de febrero. Y se vuelve a debatir fascismo vs democracia. Con tufillo electoral, pretenden reciclarse las viejas tendencias de conciliación de clases como el peronismo en todas sus variantes, en alguna forma de movimiento anti-Milei como “defensa de la democracia”. Es el problema de ver los conceptos como formas puras cuando en realidad, como enseña el marxismo, no se pueden analizar las formas de dominación por fuera de las relaciones sociales predominantes. El Estado es producto de los antagonismos sociales, es un aparato burocrático y militar en manos de la clase dominante, separado de la sociedad pero permeable a sus contradicciones. Bajo la democracia se busca legitimarlo como una obra de todos y una expresión legítima de la sociedad misma, pero dado el desarrollo inevitable de las contradicciones sociales, el recurso de la fuerza se presenta como la herramienta más eficaz de imposición del poder de clase.

    Hace 50 años el peronismo gobernante, como bonapartismo sui generis, buscó contener los antagonismos bajo la idea de “comunidad organizada” y la colaboración entre las organizaciones del capital y el trabajo. Sin embargo, la resistencia obrera ya se había probado contra la Libertadora, en militancia fabril clandestina, de desafío al mando capitalista en la producción, mediante sabotajes y huelgas sorpresivas. Hace 50 años el peronismo fracasó porque la lucha de clases tiene un desarrollo, al igual que el capitalismo, internacional. Los desequilibrios del orden mundial planteados por la lucha entre dos sistemas generaron innumerables situaciones revolucionarias. La ideología nacionalista buscó conjurarlas bajo el control estatal, pero el mismo desarrollo de las crisis económicas, políticas y sociales llevaron a la burguesía a recurrir a la dictadura de las FF.AA. como único remedio de las clases dominantes para mantener su dominación social. Así, la dictadura abierta fue y es el último recurso de la burguesía cuando teme perderlo todo. Sin embargo, aunque sufrimos una derrota histórica en manos de nuestros verdugos, la lucha de los trabajadores se siguió desarrollando en los gobiernos militares pese a las condiciones adversas. Ni la dictadura pudo contener la lucha de clases.

    A 50 años del Operativo Independencia: reivindicamos la resistencia obrera y sus métodos

    Si no priman los métodos obreros, se imponen los métodos de la burguesía y su régimen descompuesto. Por eso debemos prepararnos para tomar las calles, ocupar las reparticiones públicas, paralizar la producción, sembrando el desconcierto entre nuestros enemigos de clase. No sólo para resistir ante la ofensiva de la burguesía y el imperialismo, no sólo para enfrentar el plan de ajuste de Milei, el FMI y todos los gobernadores. Sino para prepararnos para ir por todo.

    Contra el desorden capitalista expuesto por la crisis económica mundial y las tendencias guerreristas del imperialismo, la tarea de la vanguardia obrera es preparar la toma y puesta bajo control obrero de las multinacionales que expolian al país, tanto de la industria como del campo, para imponer el control de la producción por ramas de la industria y los servicios y la escala móvil de horas de trabajo y salario, que nos permitirá ejercitarnos para tomar el estado en nuestro poder y reorganizar la economía sobre nuevas bases, socialistas e internacionales.

    Es tarea de una nueva generación de revolucionarios, reagrupar a la vanguardia obrera tras un programa de transición al socialismo, para preparar la puesta en pie de un partido revolucionario como sección de la Cuarta Internacional que pueda dirigir una ofensiva en todos los planos, económico político y militar, contra la plana mayor burguesa. Una nueva generación, no por su edad, sino porque se saque de encima el viejo lastre de las variantes estatistas y reformistas. Por eso desde la COR peleamos por la independencia de clase y por el enfrentamiento a los capitalistas, su Estado y sus instituciones.

    Vencer a burguesía desde la producción es el camino, junto al proletariado de los países de la región y el mundo, recuperando las banderas del internacionalismo obrero. En esa tarea estamos abocados los militantes revolucionarios, pero entendemos que se hace necesario reconstruir el partido revolucionario, la IV Internacional. Creemos que retomando las banderas de la lucha por la revolución socialista rendimos el mejor homenaje a las y los compañeros detenidos desaparecidos y asesinados por el Estado capitalista.

  • UNCuyo: elecciones de Centros de Estudiantes en medio de la lucha

    Arrancan las elecciones de centro de estudiantes en las facultades de Filo, Artes y Políticas de la UNCuyo. Estas elecciones de centro de estudiantes se desarrollan en un contexto de brutal crisis económica, con un desfinanciamiento histórico a la educación, despidos y salarios de pobreza.

    Las conducciones de los centros de estudiantes han cumplido el rol político de vaciar los espacios de organización. Sin embargo, y a pesar de los intentos de desmovilizar y romper la organización para mantener el status quo de las autoridades universitarias y seguir garantizando la gobernabilidad a Milei, estudiantes independientes y agrupaciones de izquierda impulsamos desde diciembre la asamblea interfacultades, en la que se fue discutiendo un plan acción que sobrepasara los límites de las burocracias estudiantiles y sindicales.

    Estas últimas semanas se lograron marchas convocadas por la asamblea interfacultades, tomas del rectorado y asambleas y vigilias en otras facultades. Logramos organizar una gran columna independiente para las dos marchas federales, diferenciándonos de las autoridades de la universidad que le descuentan los días de paro a los docentes en lucha. Todo esto se hizo pese a las conducciones de los centros de estudiantes que todo este tiempo han estado cuidándole la quintita a los decanos y rectores, dejando pasar el ajuste criminal. Hemos visto cómo el peronismo (La Soriano) que conduce el centro de estudiantes de filosofía y letras junto a los grupo del opus dei (aefyl) y la franja morada, en sus intentonas de boicotear la organización del movimiento estudiantil, unieron fuerzas para votar en contra de la toma de la facultad. En Cs. Políticas, el peronismo en la conducción, negó la posibilidad de intervenir a casi la mayoría de los que fuimos a la asamblea a proponer la toma de la facultad como continuidad del plan de lucha.

    Desde la COR formamos parte de esta enorme tendencia de lucha que recorre las universidades de todo el país, manteniendo firme nuestra posición de luchar con los métodos propios de la clase obrera y del movimiento estudiantil. Toma de los edificios ante cualquier intento de cierre de puestos de trabajo/ estudio. Somos parte activa de la Asamblea Interfacultades y bregamos por la recuperación de los centros de estudiantes como herramientas de organización y de lucha. Por todo esto, llamamos a realizar un voto crítico a la izquierda en estas elecciones de centro de estudiantes, que se presentan en el frente desde abajo (FIT), entendiendo que han sido y son parte de este proceso de lucha, pero a quienes, fraternalmente, llamamos a rever las vacilaciones con las que están interviniendo en este proceso.

    Una crítica fundamental que planteamos hacia las agrupaciones de la izquierda centrista es el carácter de clase que tiene la Universidad. Entendemos que defender la "educación pública" tal y como la conocemos, confunde las tareas. Debemos comprender que la universidad tiene carácter de clase burgués, que la mayoría de las y los trabajadores no pueden ingresar ni permanecer en la universidad ni mucho menos obtener su título si el comedor es inaccesible, si no tenemos boleto estudiantil gratuito, si estamos trabajando 9 o 12 horas con salarios de pobreza y no existe el turno noche de cursado. Al principio del cuatrimestre, el Pts sostenía que había que hacer una gran marcha para que el parlamento aprobara la ley de financiamiento universitario como su única perspectiva de lucha. Con expectativas en que el mismo parlamento burgués en el que se votó la esencialidad de la educación y la ley bases, pudiera resolver el problema presupuestario. La misma confianza depositan en todo el régimen universitario.

    A nivel internacional, ya se ha cumplido un año del Genocidio en curso que está llevando a cabo el enclave israelí sobre el pueblo Palestino. En mayo mocionamos en la asamblea interfacultades realizar una charla en solidaridad con el pueblo palestino y sobre todo, en apoyo al docente Julio Neme que estaba siendo perseguido por las autoridades de la UNCuyo por realizar una charla en contra del Genocidio. En numerosas universidades del mundo se estaban realizando acampes y acciones de solidaridad. Aquí en la UNCuyo llevamos a cabo la charla en el comedor, sin embargo, el pts no fue y tampoco colaboró en la organización. Logramos garantizarla junto a estudiantes independientes y la marea del Mst.

    En la última asamblea interfacultades que se llevó a cabo en la facultad de ciencias médicas, se mocionó hacer en Mendoza una acción en apoyo al personal de la salud, sumándonos a las acciones convocadas a nivel nacional. El personal de la salud viene sufriendo ataques hostiles, incluso en el Hospital Universitario, en el que sus trabajadores llevan meses de atraso en el pago de sus salarios. El Pts en conjunto con el peronismo, votaron en contra, y la moción se perdió por un voto. Estas vacilaciones son las que hay que superar, confiando en el programa que orienta la acción de los revolucionarios, y no en los vaivenes de la opinión pública.

    Nuestra perspectiva es la de recuperar centros de estudiantes, federaciones y sindicatos para la lucha, sacar a las burocracias de todos las conducciones que traicionan a trabajadores y estudiantes y sofocan toda iniciativa de lucha, garantizando la gobernabilidad de Milei y los gobernadores. Debemos organizar la lucha en un plenario nacional con compañeros delegados estudiantes, docentes y no docentes. Debemos imponer a las direcciones docentes, nodocentes y estudiantiles un plan de lucha unificado, que enfrente también la complicidad de los rectores radicales y del peronismo. No es sólo la universidad, es toda la educación capitalista la que está en crisis.

    Instamos a las y los estudiantes con quienes venimos dando batalla codo a codo, a impulsar juntos una campaña de convencimiento de la necesidad de plan de lucha unificado de todos los sectores educativos y avanzar hacia un Paro Educativo Nacional hasta derrotar a Milei.

    Rama Universitaria de la COR

  • UNCuyo: rectorado tomado

    Quienes venimos desde diciembre desafiando el plan motosierra y licuadora de Milei y los gobernadores, quienes sostuvimos la lucha en las calles contra el protocolo represivo de Bullrich y Cornejo, nos multiplicamos por miles en la marcha de abril y de la semana pasada. Somos los que desde hace semanas discutimos: SI HAY VETO, HAY TOMA. Nucleados en la Asamblea Intefacultades dimos la lucha política para que la UNCuyo sea parte de la tendencia de lucha, ocupaciones y tomas, que se está desarrollando en las universidades de todo el país, así como en los Hospitales Nacionales Laura Bonaparte y Garrahan. Para enfrentar a Milei y la transa en la cueva de ladrones que es el Congreso HAY QUE TOMAR LAS FACULTADES.

     

    Hoy quedó en evidencia que las conducciones de los centros de estudiantes, tanto la Franja como las agrupaciones peronistas, no tienen la decisión política de enfrentar a Milei. En la asamblea de la Facultad de Ciencias Políticas, las Trincheras, la Walsh y la Franja se abroquelaron para negar la palabra a los estudiantes, amenazando a quienes fuimos a defender la moción de toma contra el veto y contra ajuste salarial y presupuestario a las universidades. Las Trincheras, la Walsh, la Franja y las burocracias estudiantiles de los centros y de la FUC, acordaron con la rectora radical de la UNCuyo garantizar que haya “normalidad en las aulas y facultades”, por eso las autoridades dispusieron una pantalla en el comedor universitario para que sigamos pasivamente el debate parlamentario este miércoles 9. Y luego, a la casa hasta la semana que viene.

     

    Con todo tipo de maniobras, intentaron desmoralizar y desorganizar para cumplir su acuerdo con las autoridades. Fue un gran paso adelante que estudiantes de la Asamblea Interfacultades hayamos decidido y garantizado la toma del rectorado hoy, galvanizando una disposición a la lucha de un sector en aumento del movimiento estudiantil. Teníamos razón, ¡había que tomar!, por eso a las y los estudiantes de la Interfacultes que nos plantamos en el rectorado, se nos fueron sumando centenares de estudiantes, docentes y no docentes, y organizaciones que vinieron a sostener la ocupación.

     

    La toma del rectorado fue un acierto, y nos tiene que servir de espacio de reorganización para salir ofensivamente a pasar por los cursos de todas las facultades para convencer de extender esta medida de lucha hasta paralizar por completo la UNCuyo. PORQUE SI HAY VETO Y AJUSTE, SIN PRESUPUESTO Y SIN RECOMPOSICIÓN SALARIAL NO HABRÁ NORMALIDAD EN LA UNCUYO.

     

    VAMOS POR UN PARO EDUCATIVO NACIONAL CON TOMA DE FACULTADES Y ESCUELAS HASTA DERROTAR A MILEI

     

    Rama Universitaria de la COR

  • La comunidad organizada de Cornejo

    El “Acuerdo de Cooperación Social entre el Gobierno de Mendoza, cámaras empresariales y asociaciones sindicales” fue rubricado hoy por el gobernador Cornejo, cámaras patronales y Letard (Camioneros) y Márquez (UOM) por la CGT Regional Mendoza. Exultante, afirmó Cornejo: “aquí hay paz social” con el objetivo de “promover la producción y un clima laboral sin conflictos”. Ayer ya había anunciado el envío a la legislatura provincial de un proyecto de ley de adhesión al RIGI (Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones) que logró Milei en el congreso. Ahora promete enviar a la Legislatura un proyecto de presupuesto 2025 con una baja de impuestos (ingresos brutos, sellados y tasas) para beneficio de los grandes empresarios.

    Cornejo asumió su segundo mandato como gobernador, con el objetivo de revertir la derrota popular que sufrió su pupilo Suárez cuando intentó avanzar en derogar la Ley 7722 (El agua de Mendoza es un negocio - Corriente Obrera Revolucionaria (cor-digital.org)) que restringe la minería en Mendoza al prohibir el uso de sustancias químicas como cianuro, mercurio, ácido sulfúrico, y otras sustancias tóxicas similares en procesos mineros, a través de cualquier método extractivo. El masivo y heterogéneo movimiento social que repudió la reforma de la Ley 7722 que habían acordado radicales y peronistas en la Legislatura, fue la única derrota que sufrieron las sucesivas gestiones de Cambia Mendoza. Pero la derrota de Suárez y su reforma, no se tradujo en cambios en el statu quo del negocio del agua. Los propietarios de la tierra, grandes productores agrícolas, empresarios bodegueros, de la agroindustria e inmobiliarios siguieron controlando más del 80% del agua provincial (La disputa por el agua en Mendoza - Corriente Obrera Revolucionaria (cor-digital.org).

    En estos años, las gestiones de Cambia Mendoza, con colaboración del peronismo y sus alas en la legislatura, los municipios y las conducciones sindicales, han logrado avanzar sistemáticamente en fortalecer el aparto represivo estatal, cristalizando un conjunto de normativas de disciplinamiento de la mano de obra y de la protesta, control de la calle, precarización e informalidad laboral con salarios paupérrimos. Estos logros son los que ahora Cornejo ofrece al capital imperialista como un valor a explotar: aquí hay paz social.

    Nuestro país transita un cambio en los pesos específicos de las fracciones burguesas dominantes, del campo a la energía y la minería (Vaca Muerta, litio, cobre). En esta transición, hay fracciones burguesas que pierden y otras que se imponen, los que perdemos siempre somos los trabajadores. Como parte de este proceso podemos ver la creciente concentración y extranjerización de la producción vitivinícola, el retroceso de la agroindustria alimenticia en Mendoza con el cierre de industrias icónicas como La Campagnola en San Martín (¡No al cierre de La Campagnola! ¡Reincorporación ya de los despedidos! - Corriente Obrera Revolucionaria (cor-digital.org)), y recientemente La Colina en San Rafael como ejemplos. Procesos que han dejado el tendal de despidos. Así también podemos ubicar un nuevo caso de estatización de deudas privadas, saneamiento y venta a capitales yankis de IMPSA (IMPSA: otra vez rescatando al capital - Corriente Obrera Revolucionaria (cor-digital.org)).

    En esta tendencia, Cornejo y su “comunidad organizada” de cámaras patronales y burocracia sindical colaboradora, vienen avanzando en preparar las instituciones y normativas para ser socios menores de los capitales imperialistas en la expoliación de los recursos minerales y la extracción de plusvalía. A este objetivo se orientan el Plan Pilares, la actualización del Código de Procesamiento Minero, el Parque Industrial y de Servicios Pata Mora y la creación del Distrito Minero Malargüe Occidental. El Plan Pilares, desarrollado por el sector privado junto a la empresa Impulsa Mendoza Sostenible S.A. y la Universidad Nacional de Cuyo (UnCuyo), define cómo avanzar en explotar la minería en Mendoza, especialmente en lo que respecta al cobre. Para ello Cornejo sumó a Mendoza a la Mesa del Cobre, que ya integran San Juan, Salta, Jujuy y Catamarca.

    Sin embargo, la “paz social” que vende Cornejo, la provincia de cuentas ordenadas, es puro humo. Esta misma semana, los trabajadores del petróleo vienen desarrollando un proceso de paralización de tareas denunciando el incumplimiento de acuerdos en el marco de la preservación de las dotaciones de personal y las remuneraciones frente al retiro de YPF de la explotación de yacimientos declinantes. Los trabajadores judiciales paralizaron semanas los Tribunales en reclamo de recomposición salarial en una provincia que dice tener las cuentas ordenadas, pero paga los peores salarios del país y negrea los salarios docentes evadiendo sus responsabilidades patronales con el sistema previsional y de obra social. Los trabajadores de la Salud provincial llevan adelante un nuevo plan de lucha por recomposición salarial y en contra de la reforma precarizante y privatizadora del sistema de salud pública. Los trabajadores vitivinícolas tienen empantanada la paritaria, denunciando que las grandes bodegas se resisten a recomponer los salarios de miseria e indigencia que pagan. Duermen en las calles de Mendoza cada vez más indigentes, y las colas para la asistencia alimentaria en comedores populares suma varias cuadras. Esta es la contracara de la “comunidad organizada” de Cornejo, con la que colabora la burocracia de la CTA y el SUTE, sin necesidad de firmar el pacto, pero sí siendo garantes de la paz social de la mayor masa de empleados de la provincia: los docentes.

    Frente a esta política antiobrera, de ajuste, pauperización y criminalización de la protesta, la izquierda, los movimientos piqueteros, las asambleas ambientales, y trabajadores antiburocráticos venimos resistiendo y desafiando en las calles el discurso de orden capitalista. Hemos enfrentando el código contravencional provincial, el protocolo antipiquetes de Bullrich y el plan Motosierra de Milei y los gobernadores. Defendemos y seguiremos movilizando hasta lograr la caída de todas las causas a compañeras/os por luchar.

    Lo que urge, es preparar las instancias para golpear con un solo puño y hacer saltar por los aires este pacto de paz social y colaboración de clases de la burocracia de la CGT con Cornejo y las cámaras patronales. En cada lugar de trabajo impulsemos pronunciamientos de repudio contra los dirigentes quienes, en nombre del movimiento obrero pero sin mandato alguno, pretenden atarnos de pies y manos para vendernos a la expoliación imperialista. Preparemos un congreso de delegados de base mandatados, de todos los sectores de trabajo, industria, servicios y estatales, para debatir y votar un plan de acción conjunta, UN PARO GENERAL contra los despidos, contra la reforma laboral y sus leyes represivas, por el desprocesamiento de todos los luchadores, y por una recomposición general de salarios para que ningún trabajador en Mendoza gane por debajo de la línea de pobreza.

    Con despidos, represión y salarios de miseria NO HAY NI HABRÁ PAZ SOCIAL.

Please publish modules in offcanvas position.