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Molino Minetti: Derrotado el primer intento de desalojo

Sábado, 25 Enero 2020 12:16

Molino Minetti: Derrotado el primer intento de desalojo
Poner a producir el molino con los 150 adentro

El miércoles 22 de enero se vivieron momentos de tensión en el molino Minetti. Tras el cierre fraudulento de los portones por parte de la empresa para fortalecer el lock out, los compañeros decidieron recuperar la planta, con el apoyo de la comisión de mujeres y algunos grupos de izquierda, incluida nuestra corriente. La respuesta de la patronal y de toda la institucionalidad del Estado no se hizo esperar: la justicia mandó la orden de desalojo y Schiaretti a la policía provincial con un operativo contundente. Son los cómplices, junto a la burocracia de UOMA, de garantizar el no pago de salarios, el lock out y los despidos de los tenaces molineros que vienen desde hace meses resistiendo este ataque.
Finalmente, luego de horas de tensión, los delegados hicieron un acuerdo para que la policía retrocediera, un acuerdo precario ya que se mantiene la amenaza de desalojo y un móvil policial se mantiene en el predio haciendo inteligencia. La tenacidad de resistencia de los molineros es ejemplar, merece el apoyo del conjunto de nuestra clase. La burocracia sindical de las CGTs y CTAs provinciales, amigas de Schiaretti y de Alberto, le está dando la espalda al conflicto, preocupadas más por garantizar el pacto social. Las oposiciones dentro de los sindicatos debemos redoblar esfuerzos, para sostener la pelea de los molineros y para poner a nuestros sindicatos en pie de lucha. ¡Que las CGTs y CTAs llamen ya a un paro provincial!
Para avanzar en la lucha, es necesario romper el lock out poniendo el molino a producir, convocando al conjunto de los compañeros para esta enorme tarea. Los mejores aliados para esto son los sindicatos de las ramas vinculadas a los servicios, al trasporte y la distribución de la materia prima y la harina, como Camioneros, Empleados de Comercio, Luz y Fuerza y Gas. Es necesario llamar a estos sindicatos y a sus trabajadores, con la tarea principal de derrotar el actual intento de desalojo y avanzar en la puesta en producción. También es necesario continuar luchando para derrotar la política cómplice de la UOMA  y preparar el paro molinero. El camino de confiar en el ministerio, en la justicia o en el gobierno de Schiaretti ha demostrado llevar a un callejón difícil de sortear.
¡Reincorporación de todos los despedidos!
¡Poner el molino a producir!
¡Abajo el desalojo!

COR Regional Córdoba

24/01/2020

 

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  • Libertad inmediata a los compañeros de la CTA-A y ATE Córdoba

    Durante una movilización a la Secretaría de Políticas Sociales y Desarrollo Humano de la Municipalidad de Córdoba, en horas del medio día, fueron reprimidos y detenidos 15 trabajadores de la CTA-A y ATE Córdoba, entre ellos el Sec. Gral de ambas organizaciones, Federico Giuliani. La movilización reclamaba por alimentos y ayuda social.

    El repudiable accionar del peronismo cordobés de Passerini, Llaryora, Schiaretti y de la policía del gatillo fácil se explica únicamente como persecución y amedrentamiento a activistas, dirigentes y militantes que se atreven a cuestionar el descalabro social y económico, consecuencia de la aplicación del plan del FMI por parte de Milei y sus aliados, los gobernadores e intendentes de todo color político. La pose electoral de leales opositores guardianes de la gobernabilidad del peronismo cordobés está en función de la defensa de los mismos intereses capitalistas que defiende Milei. Todo esto, contra la resistencia de la clase obrera que lucha en todo el país, a través de sus instituciones, el poder judicial y la policía.

    Desde la COR, nos solidarizamos y nos ponemos a disposición de los compañeros y compañeras para impulsar las acciones y medidas que se definan para su liberación. Las conducciones burocráticas de las CTAs, la CGT y la mayoría de los sindicatos intentan llevar los reclamos por la vía muerta del parlamento y las elecciones, dando una tregua a los gobiernos y a los empresarios. Impulsemos asambleas en los lugares de trabajo para imponer a las centrales sindicales el paro provincial por la libertad de todos los detenidos y por la conquistas de todas nuestras demandas.

    28 de agosto 2025

    Corriente Obrera Revolucionaria - Regional Córdoba

  • Duro conflicto contra los despidos en PR3

    Impongamos el paro provincial por el triunfo de los químicos

    .    La embestida patronal contra los trabajadores de Petroquímica Río Tercero (PR3) sumó un nuevo capítulo el pasado miércoles 6 de agosto, fecha de pago de los salarios. La patronal presentó una extorsión al Sindicato Químico y Petroquímico de Río Tercero (SPIQyP Río III), proponiendo pagar solo el 50% de los salarios a cambio de que los trabajadores depongan la lucha contra los 124 despidos que la empresa efectuó a mediados de julio. Frente a la negativa obrera a aceptar los despidos, la patronal anunció y cumplió el no pago de la totalidad de los salarios, incluyendo a todo el personal. Recordemos que la secretaría de trabajo provincial de Omar Sereno impuso una Conciliación Obligatoria (CO) por la cuál todos los trabajadores tienen acceso a la planta, pero con la particularidad de que la empresa no les da tareas al haber parado a cero la producción, es decir, mantiene un lock out patronal ofensivo, a lo que ahora se suma el no pago de salarios. La CO sirve de cobertura al lock out y ayuda a la patronal en su estrategia de desgaste, demostrando una vez más el rol de la secretaría de trabajo en cada conflicto, jugando siempre para los empresarios. La empresa tiene en curso un Concurso Preventivo de Acreedores solicitado ante el tribunal en lo Comercial N.º 23 de la Ciudad de Buenos Aires y apuesta a ganar tiempo para meter a los salarios e incluso a las indemnizaciones devengadas en el barro del concurso de acreedores.
        Frente a la nueva ofensiva que constituye el no pago de haberes, los trabajadores de PR3 definieron mantenerse firmes dentro de planta, superando la intentona de la policía provincial de Llaryora de impedir el ingreso del turno noche el mismo 6/8. La ocupación de la planta cobra vital importancia ya que plantea prácticamente el problema de saber quién es el dueño de la fábrica: el capitalista o los obreros; permite a los trabajadores ganar una posición de fuerza, aunque sea temporalmente ya que sabemos que la clase capitalista y las instituciones represivas del Estado a su servicio no pueden permitir esta afrenta a los “sacrosantos valores” de la propiedad privada de los medios de producción. Pero la pelea de PR3 no se da en el vacío, sino en medio de una profundización de la crisis capitalista a nivel internacional y de la crisis industrial pronunciada que atraviesa nuestro país como consecuencia de la política del gobierno del FMI que encabeza el títere Milei. La importancia de la lucha de los químicos de Río Tercero es que están mostrando un método para enfrentar los despidos a nivel nacional en medio de la crisis producida por la recesión y la apertura de las importaciones. La ocupación debe ser planteada como un hecho político que apueste a desarrollar una ola de ocupación de fábricas en todo el país; es sobre esa tendencia que la lucha de los trabajadores PR3 adquiere su dimensión y tiene posibilidades de desarrollarse en una perspectiva de triunfo.

    El problema de las importaciones

        Algunos sectores sindicales, que van desde la burocracia de la CGT a sectores combativos y al centrismo trotskista, caracterizan la apertura de importaciones y en general la política de desregulación económica de los nefastos ministros Caputo y Sturzenegger como una ofensiva contra la llamada industria nacional que llevaría a un “industricidio”. La realidad es que las patronales, tanto nacionales como imperialistas afincadas en Argentina, continúan aplaudiendo las medidas del gobierno y se aplican a reconvertir sus fábricas en centros de logística para el acopio y distribución de esas importaciones. No hay industria nacional que defender, lo que debe ser defendido son los salarios y las condiciones de trabajo de la clase obrera, que son el verdadero blanco de la política pro imperialista de Milei y su pandilla de ajustadores. A viva voz, la UIA, las Pymes, la AmCham y demás cámaras patronales plantean que “para poder competir” necesitan el avance de la reforma laboral. El objetivo del gobierno con su política es ponernos a competir con la clase obrera del resto de los países para bajar, acá y allá, los salarios y las condiciones de trabajo. Es por eso que debemos plantear, junto con el control obrero de las ramas como forma de mostrar el poder obrero y la capacidad de nuestra clase de enfrentar la desorganización de la economía capitalista, el Monopolio del Comercio Exterior, no como una medida nacionalista para unirnos a la burguesía nacional contra la producción extranjera, sino como una herramienta del poder obrero para defender a nuestra clase, en alianza con los trabajadores del resto del mundo, contra los ataques del imperialismo y sus socios menores.
        Para combatir la ola de despidos y el aumento de la desocupación, que va de la mano con la degradación de las condiciones laborales para imponernos el pluriempleo y/o la extensión de las jornadas a 10, 12 o más horas, tenemos planteado imponer las escalas móviles de horas de trabajo y salarios a partir de nuestros métodos de lucha y de nuestras organizaciones: el control obrero y las organizaciones sindicales recuperadas de la burocracia. Las escalas móviles plantean, frente a la anarquía económica que imponen las leyes del capital, la transición al sistema de trabajo de una sociedad socialista, donde la producción se organice sobre nuevas bases sociales.

    ¡Todos con los químicos de PR3!

        La lucha de los químicos de PR3 tiene que triunfar. Para eso, necesita la solidaridad del conjunto de la clase obrera y de los luchadores de Córdoba. Ante cualquier atisbo de desalojo, el movimiento estudiantil combativo que despuntó con la lucha universitaria del año pasado tiene planteado tomar las facultades.  Y lo más importante, los sindicatos, juntas internas y cuerpos de delegados recuperados y los activistas combativos tenemos el compromiso de llevar esta discusión al interior de nuestros lugares de trabajo. Debemos discutir como enfrentar los despidos, el ataque al salario y a las condiciones de trabajo, para apoyar a los químicos de Rio Tercero y también para poner en pie de lucha al conjunto de nuestra clase frente a los ataques de las empresas, el gobierno nacional y los gobierno provincial y locales, con la complicidad de la burocracia sindical de las CGTs y las CTAs. Impulsemos asambleas en cada fábrica, escuela y lugar de trabajo; mocionemos un Congreso de Delegados con mandato de base de todo el movimiento obrero de Córdoba para discutir un programa y organizar el plan de lucha y el paro provincial.

    • Por el triunfo de PR3 y de todas las luchas
    • Congreso de Delegados con mandato de base
    • Impongamos a la burocracia el Paro provincial
    • Abajo Milei y a sus cómplices, garantes del plan del imperialismo para la región
    • Fuera el FMI
    • Por un paro nacional activo de 36hs.
    • Por un gobierno obrero
  • A 50 años del inicio del Operativo Independencia

    El 5 de febrero de 1975, María Isabel Martínez de Perón, en ejercicio de la presidencia tras la muerte de Juan Domingo Perón, firmó el decreto del Poder Ejecutivo Nacional N° 261 que dispuso en su artículo 1°: “El Comando General del Ejército procederá a ejecutar las operaciones militares que sean necesarias a efectos de neutralizar y/o aniquilar el accionar de elementos subversivos que actúan en la provincia de Tucumán”. El resto del articulado del decreto disponía la concentración del personal y medios policiales provinciales bajo control operacional del Comando General del Ejército. Así también establecía tareas de “acción cívica” (art. 5°) y “acción psicológica” (art´. 6°).

    Esta orden represiva del gobierno constitucional peronista, se complementó con otros decretos secretos que dieron forma al despliegue territorial y al plan operacional que será un gran ensayo reaccionario del terrorismo de Estado que se generalizará tras el golpe un año después. La tortura de detenidos ya era una práctica del aparato represivo del Estado desde décadas atrás, así como el propio Perón había dado rienda suelta al accionar de grupos de tareas parapoliciales como la Triple A para perseguir y asesinar a la izquierda peronista y a la militancia obrera y de izquierda. Pero el Operativo Independencia fue un ensayo a gran escala del plan genocida cívico-militar:

    • El Operativo institucionalizó la desaparición forzada de personas en un sistema de centros clandestinos de detención como metodología de terrorismo de Estado. Unas 825 personas fueron detenidas y torturadas en al menos 80 centros clandestinos, de las cuales 258 personas continúan desaparecidas,
    • contó con la participación activa de las grandes empresas y familias poderosas de Tucumán, directas beneficiarias del accionar represivo. La responsabilidad empresaria se materializó en la sesión de tierras para la relocalización y control de población obrera rural, el aporte de grandes sumas de dinero para financiar el accionar represivo, la sesión de vehículos e inmuebles para ser utilizados en el secuestro, detención, tortura, asesinato y desaparición de delegados sindicales y activistas obreros de sus fábricas e ingenios,
    • complicidad judicial con la represión clandestina e ilegal,
    • colaboración y justificación del accionar represivo de parte de todos los partidos patronales (UCR, PJ), de la burocracia sindical peronista y la Iglesia.

    La vanguardia de la resistencia obrera como objetivo del accionar del Operativo

    La resistencia obrera a la dictadura de Onganía y a los planes patronales de imponer una nueva relación de fuerzas en la producción, moldeó una nueva generación de trabajadores. Un activismo de base hizo su experiencia con la burocracia peronista que colaboraba abiertamente con el gobierno militar y se acomodaba a la idea de un peronismo sin Perón (en el exilio). Se templó en la militancia obrera clandestina en las fábricas de los cordones industriales, organizando sabotajes al aumento e intensificación de los ritmos de trabajo que imponían las patronales, y preparando la recuperación de los sindicatos contra la burocracia traidora.

    Este proceso será expresión en nuestro país de la tendencia internacional al ascenso de la lucha de clases, en la que amplios sectores de la clase obrera y la juventud mostraron enorme politización y combatividad. Los obreros del azúcar en el NOA serán parte de esta tendencia. En Tucumán, tuvo centralidad la lucha de los ocupados y desocupados del azúcar contra el cierre de ingenios y los despidos masivos que impuso Onganía en base a una brutal represión. En enero de 1967 la policía tucumana asesina a Hilda Guerrero de Molina, esposa de un desocupado del Ingenio Santa Lucía, durante la violenta represión de una manifestación de obreros del azúcar. El despliegue represivo no contendrá la disposición a la lucha que seguirá en ascenso con hitos como el Tucumanazo (noviembre de 1970), el Quintazo (junio de 1972), la huelga de los obreros de Ledesma en 1972 (la primera huelga en 21 años) en Jujuy, y la huelga general de la FOTIA en 1974. Este proceso excedía en gran medida la influencia de las organizaciones que desarrollaron las estrategias de guerrilla urbana o foco rural. El Operativo Independencia se propuso no sólo el aniquilamiento del ERP en el monte, sino a toda la resistencia obrera y popular que se forjó durante la resistencia obrera previa.

    La ausencia de un partido revolucionario

    Existían numerosas organizaciones de izquierda, de diversas tendencias, con presencia y militancia en las fábricas. A causa de la influencia de la revolución cubana y los movimientos de liberación nacional, sectores de la juventud radicalizada habían escogido el camino de la lucha armada, entre los cuales el PRT-ERP apostó al desarrollo de una estrategia foquista en el sudoeste tucumano. Sin embargo, la influencia ideológica de una tendencia burguesa como el peronismo, imprimía un sello conservador aún en los sectores más radicalizados del movimiento obrero, impidiendo por accionar de la burocracia sindical el camino hacia la dictadura proletariado.

    La lucha de clases se desarrollaba a nivel mundial de forma acelerada, pero operaban los diques de contención apuntalados por la burguesía nacionalista: la ideología estatista, la ilusión reformista y la acción contrarrevolucionaria de burocracia sindical. En igual sentido actuaba la burocracia estalinista que maniobraba en los países semicoloniales en función de su disputa con la burguesía imperialista. El castrismo, alineado a Moscú, practicó la lucha armada, pero pronto el foquismo se reveló impotente en la mayoría de los países, centralmente urbanos y de composición obrera. El trotskismo del SU claudicaba ante el castrismo, sustituyendo a clase obrera por la guerrilla como sujeto de la revolución, y el morenismo practicaba una política conciliatoria al adaptarse al peronismo.

    Aunque la disposición a la lucha era amplia entre los obreros y la juventud, la ausencia de una dirección revolucionaria, el control burocrático de los sindicatos y la dispersión de los grupos trotskistas impidieron el surgimiento de un partido capaz de unir a la vanguardia obrera organizada en las comisiones internas y cuerpos de delegados, recuperar los sindicatos y establecer una alianza con la población oprimida en torno de un programa que sostuviera los principios del internacionalismo proletario y la dictadura proletaria. Una vez más, la crisis histórica de la dirección revolucionaria.

    Tras el ensayo en Tucumán, el golpe.

    Aunque el gobierno peronista había logrado derrotar a la guerrilla con el Operativo Independencia y asestado un golpe al movimiento obrero con el “Pacto social” y el plan económico de Celestino Rodrigo, las masas obreras seguían con notable vitalidad luchando por sus reivindicaciones y radicalizando sus métodos con ocupaciones, piquetes y secuestros de patrones.

    El último recurso que quedaba a la burguesía era el Ejército, cuyos cuadros dirigentes habían sido preparados por el imperialismo yanqui para la “guerra contra el enemigo interno” testeada en Tucumán. El golpe en 1976 estableció una feroz dictadura que generalizó en todo el país el plan sistemático ensayado y perfeccionado en Tucumán. El terrorismo de Estado liquidó lo mejor de una generación que avanzaba hacia una clara ruptura con el capitalismo. El golpe fue parte de un plan reaccionario continental que abarcó a los principales países de Latinoamérica y estableció la doctrina de seguridad nacional como forma de dominar a las masas que cuestionaban de forma abierta la opresión imperialista y el orden burgués. En su carácter de gendarme mundial del capitalismo, EE.UU alineó a los estados semicoloniales bajo su égida para someter a sangre y fuego el avance de los movimientos revolucionarios.

    Contra las provocaciones del negacionismo

    Repudiamos las provocaciones montadas por la “familia militar” de los condenados por delitos de lesa humanidad y los nostálgicos de la dictadura, que organizan en Tucumán actos reivindicativos del accionar del Ejército a 50 años del Operativo Independencia. Forma parte de las provocaciones que monta el negacionismo, buscando el auspicio del gobierno de LLA, de la alicaída Villarruel y del peronismo provincial para lograr impunidad y legitimidad para el accionar represivo de ayer y de hoy.

    Los ataques verbales y las políticas de Milei y sus acólitos, tuvieron un repudio masivo en las calles el pasado 1ro de febrero. Y se vuelve a debatir fascismo vs democracia. Con tufillo electoral, pretenden reciclarse las viejas tendencias de conciliación de clases como el peronismo en todas sus variantes, en alguna forma de movimiento anti-Milei como “defensa de la democracia”. Es el problema de ver los conceptos como formas puras cuando en realidad, como enseña el marxismo, no se pueden analizar las formas de dominación por fuera de las relaciones sociales predominantes. El Estado es producto de los antagonismos sociales, es un aparato burocrático y militar en manos de la clase dominante, separado de la sociedad pero permeable a sus contradicciones. Bajo la democracia se busca legitimarlo como una obra de todos y una expresión legítima de la sociedad misma, pero dado el desarrollo inevitable de las contradicciones sociales, el recurso de la fuerza se presenta como la herramienta más eficaz de imposición del poder de clase.

    Hace 50 años el peronismo gobernante, como bonapartismo sui generis, buscó contener los antagonismos bajo la idea de “comunidad organizada” y la colaboración entre las organizaciones del capital y el trabajo. Sin embargo, la resistencia obrera ya se había probado contra la Libertadora, en militancia fabril clandestina, de desafío al mando capitalista en la producción, mediante sabotajes y huelgas sorpresivas. Hace 50 años el peronismo fracasó porque la lucha de clases tiene un desarrollo, al igual que el capitalismo, internacional. Los desequilibrios del orden mundial planteados por la lucha entre dos sistemas generaron innumerables situaciones revolucionarias. La ideología nacionalista buscó conjurarlas bajo el control estatal, pero el mismo desarrollo de las crisis económicas, políticas y sociales llevaron a la burguesía a recurrir a la dictadura de las FF.AA. como único remedio de las clases dominantes para mantener su dominación social. Así, la dictadura abierta fue y es el último recurso de la burguesía cuando teme perderlo todo. Sin embargo, aunque sufrimos una derrota histórica en manos de nuestros verdugos, la lucha de los trabajadores se siguió desarrollando en los gobiernos militares pese a las condiciones adversas. Ni la dictadura pudo contener la lucha de clases.

    A 50 años del Operativo Independencia: reivindicamos la resistencia obrera y sus métodos

    Si no priman los métodos obreros, se imponen los métodos de la burguesía y su régimen descompuesto. Por eso debemos prepararnos para tomar las calles, ocupar las reparticiones públicas, paralizar la producción, sembrando el desconcierto entre nuestros enemigos de clase. No sólo para resistir ante la ofensiva de la burguesía y el imperialismo, no sólo para enfrentar el plan de ajuste de Milei, el FMI y todos los gobernadores. Sino para prepararnos para ir por todo.

    Contra el desorden capitalista expuesto por la crisis económica mundial y las tendencias guerreristas del imperialismo, la tarea de la vanguardia obrera es preparar la toma y puesta bajo control obrero de las multinacionales que expolian al país, tanto de la industria como del campo, para imponer el control de la producción por ramas de la industria y los servicios y la escala móvil de horas de trabajo y salario, que nos permitirá ejercitarnos para tomar el estado en nuestro poder y reorganizar la economía sobre nuevas bases, socialistas e internacionales.

    Es tarea de una nueva generación de revolucionarios, reagrupar a la vanguardia obrera tras un programa de transición al socialismo, para preparar la puesta en pie de un partido revolucionario como sección de la Cuarta Internacional que pueda dirigir una ofensiva en todos los planos, económico político y militar, contra la plana mayor burguesa. Una nueva generación, no por su edad, sino porque se saque de encima el viejo lastre de las variantes estatistas y reformistas. Por eso desde la COR peleamos por la independencia de clase y por el enfrentamiento a los capitalistas, su Estado y sus instituciones.

    Vencer a burguesía desde la producción es el camino, junto al proletariado de los países de la región y el mundo, recuperando las banderas del internacionalismo obrero. En esa tarea estamos abocados los militantes revolucionarios, pero entendemos que se hace necesario reconstruir el partido revolucionario, la IV Internacional. Creemos que retomando las banderas de la lucha por la revolución socialista rendimos el mejor homenaje a las y los compañeros detenidos desaparecidos y asesinados por el Estado capitalista.

  • Por el triunfo de la lucha del SUTNA

    El sindicato del neumático está siendo atacado por ser una organización recuperada de la burocracia y con una dirección combativa. El ataque viene por parte de los empresarios de la rama, como por el gobierno de Milei, con la complicidad de la burocracia sindical.

    A los despidos en FATE, les siguieron suspensiones y lockout patronal en Bridgestone y amenazas de más despidos ante el pedido de preventivo de crisis de ambas empresas. Esto es para presionar al sindicato para que negocie conquistas y al gobierno para buscar algunos beneficios económicos o exenciones de impuestos que puedan paliar la crisis en el rubro ante la caída de las ventas y el aumento del precio de los insumos.

    La dirección del sindicato ha respondido con medidas de lucha, asambleas por turno y una general, pero el nivel de ataque de las patronales y el gobierno plantean la necesidad de discutir con el conjunto de los trabajadores de las 3 plantas nuevas medidas, más radicalizadas, ante el ataque en curso.

    Por eso debemos rodear de solidaridad al sindicato del neumático y abrir un debate ante la necesidad de desplegar métodos de la clase en función de frenar y derrotar los ataques. Está planteado no sólo paralizar todas las plantas, sino también la preparación de la ocupación de Bridgestone si la patronal amaga a irse.

    Las medidas deben ser acompañadas por un debate programático, no sólo hacia el conjunto de los trabajadores de la rama, sino al conjunto de la clase, sobre cómo debemos intervenir ante un preventivo de crisis, despidos, suspensiones y cómo enfrentar a las patronales, el gobierno y la burocracia cómplice.

    Mientras la burocracia sindical se sienta con el gobierno de Milei para negociar sus prebendas y no hizo absolutamente nada en contra de la “ley bases” y la reforma laboral, la lucha de los compañeros del SUTNA puede mostrar la potencialidad de una vanguardia obrera para plantear otro camino a los trabajadores que están luchando en gran parte del país y que vienen resistiendo el ajuste de Milei y el FMI. Como plantea Lenin, “…son los liberales, los que dicen a los obreros: "ustedes son fuertes cuando encuentran simpatías en la sociedad… El marxista dice: Ustedes encuentran simpatías en la sociedad cuando son fuertes.” 

    Las patronales del neumático no pueden mostrar la crisis del sector, pero sí quieren recuperar el control de las fábricas que han puesto en cuestión los compañeros del SUTNA, es decir, buscan descabezar la dirección para que haya una dirección peronista o conciliadora que permita una cierta paz social en las fábricas. Por eso es muy importante demostrar lo parasitaria que es una dirección patronal en la industria, que sólo busca ganancias a costa de un despilfarro de horas de trabajo en función de la competencia en el mercado.

    El SUTNA debe levantar la pelea por el control obrero de la rama del neumático ante la desorganización de la economía, que los trabajadores podemos organizar sobre otras bases sociales. Imponer este control obrero en las fábricas es una medida transicional de desorganización de la burguesía permitiría ampliar las funciones del sindicato en la tarea de desarrollar una idea de escuela comunista en organizaciones de nuestra clase. Esto implicaría avanzar en la destrucción de la competencia entre trabajadores, a la que los lleva la patronal a nivel nacional, y sería un gran ejemplo internacional para los trabajadores de la rama en otros países.  En este sentido, el control obrero no se plantea como una eventual salida anticrisis y democrática, sino como ataque a la desorganización económica de la burguesía.

    También es urgente la necesidad programática de levantar escala móvil de horas de trabajo y salario, no sólo como medida para paliar los efectos de una crisis, sino como “sistema de trabajo de una futura sociedad socialista”. Sólo desde aquí puede entenderse por qué “escala” y no “reparto”. El planteo de “escala móvil” intenta profundizar en la raíz de los problemas de la producción y distribución del capital, mientras que el “reparto” sólo es una medida anticíclica.

    Algunos dirán que lo que planteamos es delirante o irrealizable, lamentamos decirles que estas experiencias son parte de la historia de nuestra clase.  Además, la alternativa sería seguir aceptando la dirección capitalista en las fábricas y sólo pelear por mejores condiciones y resignarnos a ser siempre trabajadores. Entre otras corrientes, el peronismo siempre sostuvo esto y sabemos que jamás estuvo del lado de los trabajadores, sino que planteó que lo que se debía hacer era aumentar la productividad del trabajo así ganaba el empresario y, a lo sumo, mantenía su vida de explotado el trabajador.

    Levantar un programa transicional tiene la fuerza de buscar atacar a la burguesía en su raíz, que es la producción, pero, como el nombre lo dice, es transicional. No lo planteamos como la única solución porque, de ser así, no sería transicional hacia la revolución y crearía ilusiones reformistas de que puede haber solución dentro del sistema capitalista. “Las medidas transicionales aun operan formalmente en el marco del régimen burgués. Pero en realidad, son ya intervenciones del poder estatal proletario que limita de manera consciente y despiadada el derecho de los capitalistas a disponer de sus bienes y el afán de lucro capitalista.” (4° Congreso de la IC, 1922)

    Intentamos hacer un aporte a una lucha muy dura y estaremos con los compañeros en las medidas que voten como la marcha a Plaza de Mayo para el viernes 26 de julio.

    Por un congreso de delegados de base con mandato para imponer un paro nacional y por el triunfo de todas las luchas en curso y tirar abajo el gobierno de Milei y sus aliados.

    Luchamos por la independencia de los sindicatos del Estado, por la democracia obrera en la necesidad de construir un partido revolucionario como sección de la Cuarta Internacional reconstruida.

     

     

  • Repudiamos los nuevos allanamientos contra ATE en Río Cuarto

    En horas del mediodía de este martes 28 de mayo, la policía de Córdoba bajo órdenes del fiscal de Aragón allanó la sede de la seccional Río Cuarto de ATE y el domicilio del Secretario General del sindicato a nivel provincial, Federico Giuliani. Esto, luego de haber allanado el domicilio de los militantes de ATE Andrea Ferreyra y Carlos Rang la semana pasada en la misma ciudad. Y días después del despliegue represivo llevado a cabo por las fuerzas de seguridad contra la movilización para repudiar la presencia de Milei en la ciudad de Córdoba el 25 de Mayo, en el marco de la cuál se registraron 14 herido y fueron detenidas e imputadas las docentes Nora Reynoso y Huayra Luciana Morón. La Córdoba burguesa, que el 25 de Mayo celebró el pacto patronal entre Llaryora y Milei y la orientación abiertamente antiobrera de sus gobiernos, cuenta en la justicia cordobesa y la policía provincial con espadas que vienen utilizando para amedrentar a los luchadores, reprimir las luchas por salarios y contra los despidos y garantizar el plan de ataque dictado por el FMI.
    El allanamiento de un local sindical es un hecho que escala el nivel de persecución contra nuestra clase, no lo podemos dejar pasar. El conjunto de las organizaciones obreras deben responder enérgicamente, no sólo pronunciándose en contra sino formulando un plan de lucha y un paro provincial para tirar abajo este plan nefasto que quieren imponer con represión. Es primordial organizarnos en las estructuras laborales, en las fábricas, en las escuelas y en las universidades para golpear a los capitalistas en la producción y desorganizar el aparato estatal. Impulsemos asambleas y un congreso de delegados de base con mandato para votar un programa obrero de salida a la crisis y organizar el paro provincial.

    ¡Fuera las manos del Estado y su justicia de nuestros sindicatos!

    Desprocesamiento y/o absolución de los luchadores obreros y populares.

    ¡Paro provincial, ya!

    COR - Regional Córdoba

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