En función del brutal ajuste del FMI y las patronales, el gobierno de Macri profundiza la represión sobre los luchadores. Es en este cuadro que se inscriben el encarcelamiento de Daniel Ruiz y los 4 choferes de la Línea Este de La Palta, así como el juicio que se lleva adelante contra los petroleros de Las Heras en Santa Cruz.
Daniel Ruiz, militante del PSTU, está detenido en el penal de Macros Paz desde hace 8 meses. El juez Torres, al servicio de la ministra Bullrich, lo metió preso por su participación en la masiva movilización del 18 de diciembre de 2017 contra el saqueo a las jubilaciones y donde hubo enfrentamientos con la policía federal frente al Congreso Nacional. Por la misma causa también es perseguido Sebastián Romero (pstu) y están procesados Dimas Ponce y Cesar Arakaki del Partido Obrero.
Los 4 ex choferes de la línea Este (autobuses de La Plata) son Sebastián Mac Dougall, Emanuel Lazzaro, Pablo Varriano y Luciano Fiocchi y fueron detenidos el pasado 3 abril en forma completamente irregular y son acusados de “coacción agravada” por participar en la huelga que duró un mes con ocupación del establecimiento, que llevaron adelante en defensa de sus puestos de trabajo y la organización sindical en 2017. Desde el 29 de abril, fueron liberados de sus lugares de detención, pero siguen bajo prisión domiciliaria.
En la provincia kirchnerista de Santa Cruz en estos días se estuvo realizando el juicio contra los petroleros Martín Oñate, Néstor Vivares, ex integrantes del sindicato petrolero de la provincia, y Jorge Armoa, ex delegado gremial, por el bloqueo frente al portón de acceso de la empresa contratista Bacsa en una lucha por despidos en 2014. El 7 mayo se conocerá la sentencia y la fiscalía pidió dos años de prisión en suspenso por “coacción simple” y “entorpecimiento de la actividad económica”.
Por su puesto, el objetivo de fondo de la judicialización de la lucha, del encarcelamiento de dirigentes y activistas obreros, es el de disciplinar a nuestra clase y sus sectores de vanguardia. Gobierno, jueces, empresarios y los distintos partidos patronales, junto a la burocracia sindical, coinciden en defender la “legalidad” de los explotadores para privarnos a los trabajadores de los métodos de lucha con que mejor podemos enfrentarlos.
Desde la COR llamamos a rechazar la persecución del estado y sus instituciones y a profundizar la campaña desde cada organización de lucha, sindicato, centro de estudiante, federación, por la inmediata libertad de Daniel Ruiz y los cuatro choferes de la Línea a Este; por la absolución de los petroleros Oñate, Armoa y Vivares; por el desprocesamiento de todos los luchadores y la defensa de nuestros métodos obreros de lucha.
¡Libertad a los presos por luchar! ¡Absolución a los petroleros! ¡Por una salida obrera a la crisis capitalista!