Repudiamos la persecución a Alejandro Crespo, Sec. Gral. del SUTNA

La multinacional Bridgestone denunció penalmente por acciones coactivas a Alejandro Crespo, en medio de un prolongado conflicto con la empresa y a días del llamado de una Asamblea general del sindicato para definir un plan de lucha por el salario y las condiciones laborales en la rama del neumático.

Es un ataque a un sindicato antiburocrático y combativo dirigido por el PO, en un intento de buscar disciplinar a su dirección. Para esto utilizan las instituciones del Estado burgués, en este caso a la justicia, ya que en el terreno de la lucha de clases y los métodos obreros no han logrado hacerlo, como quedó demostrado en las últimas luchas del sindicato.

Pero este ataque no es algo aislado, como lo muestran la represión a los docentes salteños, las imputaciones a los delegados de salud y dirigentes sindical y piqueteros cordobeces, sólo por nombrar los ejemplos más recientes; es para preparar las condiciones en las relaciones de fuerza para avanzar en las supuestas reformas que necesita el empresariado, las fracciones burguesas y pequeño burguesas, en complicidad con la burocracia sindical, para cumplir con las directrices del FMI. Pretenden meternos en un escenario electoral lo menos convulsionado posible, una trampa que es evidente que no va a dar ninguna salida a nuestra clase.

Es importante que este ataque no pase, por eso debemos rodear de solidaridad al sindicato en una campaña nacional e internacional, impulsando asambleas en los lugares de trabajo que hagan mociones en repudio y preparemos acciones para hacer retroceder a la patronal de Bridgestone y, en esta lucha, mostrar al conjunto de las patronales y sus aliados que con las organizaciones obreras no se jode.

Desde la COR nos ponemos a disposición de las medidas que se impulsen, en la necesidad de buscar instancias de reorganización de los trabajadores ocupados y desocupados que tome como tarea la organización de un Congreso de delegados de base con mandato para enfrentar al gobierno de Alberto, Cristina y Massa y su plan dictado por el FMI.